¿Usurpación de autonomía en la gestión de las cuentas municipales? IGNACIO PALMER GONZÁLEZ. Secretario de Organización del Partido Popular de Alcoy

Durante esta semana nos ha llegado por todas partes aquello de que el Consell de la Generalitat Valenciana va a dar libros gratis a todos los alumnos.

Esta medida que han improvisado no es del todo cierta, debido a que la Generalitat solo pargará un tercio de la aportación, el resto se pagará entre las Diputaciones y Ayuntamientos. Pero lo sorprendente es que se ha decidido la medida sin consultar con ellos.
También hemos oído esta semana al Sr. Alcalde anunciar que en breve saldrá el pronunciamiento del juzgado por la presunta usurpación de autonomía desde la Generalitat al Ayuntamiento con el tema de Alcoinnova.

Al respecto habrá que decirle al Sr. Alcalde que siguiendo su criterio sobre la autonomía municipal, lo que tendría que hacer es interponer otro contencioso ante la Generalitat por decidir por el Ayuntamiento de Alcoy cómo gastar el dinero de los alcoyanos. A no ser que el criterio utilizado por el Sr. Alcalde fuera meramente político, algo que no tendríamos que aguantar los alcoyanos por ir en perjuicio de la velocidad de regeneración empresarial de la ciudad. Digo velocidad porque estoy convencido de que Alcoinnova se hará.

Volviendo al tema de los libros, la medida despierta algunas cuestiones sobre futuras decisiones políticas. La más importante es sobre el procedimiento y la última Ley educativa aprobada.
Resulta que a los padres se les dará una ayuda de 100€ para comprar los libros y otros 100€ cuando se devuelvan, para crear un banco de libros.
Los libros, en sus contenidos, van vinculados a la Ley educativa aplicada en cada momento, Ley con la que los partidos de izquierda están en contra, pero si estos libros se van a utilizar en un futuro, quiere decir que van a mantener la LOMCE o es que saben que no van poder gobernar España.

Lo que no cabe duda es que en el tema de los libros, aun siendo una medida muy interesante para los padres, es una medida improvisada, oportunista, anunciada con nocturnidad ante las administraciones locales, pero sobre todo una medida ya electoral para las inminentes elecciones generales.

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