Una semana de película

En Cocentaina se han pasado un sábado de película. Literal. Y para ello se han montado una Entrada de moros y cristianos, con su enramada, sus escuadras, carroza de capitán, mentireta y un público entusiasmado. De todo, sí señor. El Passeig, el escenario de todos los grandes saraos socarrats, ha acogido el rodaje de la película ‘Camí a casa’, con José Sacristán como protagonista y un montón de extras del terreno. Una fiesta, en toda regla. En noviembre. No ha sido, sin embargo, la película de la semana en la capital del Comtat. Briet, el alcalde que ya anunciado que no repetirá cartel, ha estado al borde de un ataque de nervios, como las mujeres de la película de Almodóvar. De echar a correr y no parar. De refugiarse en templo budista. De tirar la toalla… Y es que al alcalde y su equipo de gobierno, la oposición le ha tumbado el proyecto del campo de fútbol de césped artificial de La Vía.

El alcalde tenía 313.000 euros gastadors de un remanente de tesorería que venían que ni al pelo para el susodicho proyecto. Pero su gozo ha caído en un pozo, eso pozo sin fondo al que han ido a parar todas sus ilusiones en la actual legislatura, casi cuatro años en los que ha gobernado en minoría, lo que supone tener que pasar por el aro de una oposición que le han dejado muy poco margen, por no decir ninguno, para el lucimiento. Y el campo de La Vía era una medalla que no se podía permitir. Que no le iban a permitir, vamos, a tan poco meses de las elecciones. Ni el dinero disponible ni las 800 firmas reclamando el nuevo campo, ni tampoco el desgaste de La Morera, por el que pasan a diario cientos de deportistas, ha sido argumentos suficiente para que PP y Col.lectiu le dieran ese gusto al Gobierno local. La película de la semana en la que se han visto inmersos los portavoces de las formaciones con representación municipal ha finalizado con los 313.000 euros destinados al pago de la deuda que el Ayuntamiento tiene contraída con los bancos. Porca miseria.
Para conocer el desenlace de la otra película, la que se ha rodado en el Passeig, habrá que esperar. Y esperar que tenga mejor final, claro.