Un país de abuelas y abuelos

Por vez primera desde el año 1944, España registrará menos nacimientos que muertes, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Las predicciones del instituto indican que la baja natalidad es una tendencia que se va a mantener en nuestro país por una serie de circunstancias entre las cuales -destaca el estudio- el 25% de las mujeres en edad fértil no tiene hijos y los que tienen no superan la media de 1’4. Los analistas del INE sostienen que España perderá un millón de habitantes en los próximos 15 años y 5’6 millones hasta 2064.

Asimismo, el mismo Instituto ha hecho público que en los cuatro años de gobierno del PP el paro ha descendido en 271.200 personas respecto de los millones de desempleados que “heredó” del PSOE pero en la actual legislatura los cotizantes a la Seguridad Social han descendido en 25.400 personas. También ha bajado el fondo para pensionistas de la SS que dejó la administración socialista, el más elevado que alcanzamos los jubilados españoles, nada menos que 66.815 millones de euros dejó el PSOE en Caja aunque el gobierno del PP ha reducido este Fondo de Reserva , la denominada “hucha de los pensionistas”, en 34.221 millones, prácticamente la mitad del capital que dejó el gobierno socialista.

Se considera que el empleo basura y los bajos salarios actuales son la principal causa del descenso de las recaudaciones de la SS pero, sobre todo, porque en los últimos cuatro años las personas afiliadas y cotizantes a la Seguridad Social, según el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, han bajado: en noviembre de 2011 habían 17’25 millones de trabajadores y en noviembre de 2015, 17’22 millones. ¿Cómo es posible que quienes están gobernando sigan presumiendo de creación de empleo cuando estos datos aparecen en prensa de ámbito nacional y nunca fueron desmentidos por el Gobierno?

Independientemente de estas malas noticias que algunos políticos olvidan o tergiversan para que los ingenuos les sigan votando, el problema para los jubilados podría agravarse si consideramos que un reciente estudio ha señalado que entre 1910 y 2009 los españoles varones pasamos de una esperanza de vida al nacer de 38’8 años a 78’4, y las mujeres de 42’6 a 84’5. O sea, que a los jubilados de este país, por el hecho de vivir más años, podría esperarnos un difícil futuro ya que los trabajadores españoles cada vez cotizan menos a la SS. Sólo faltaba amargarnos la vida a la vejez.

Y si giramos la vista hacia Alcoy, según datos publicados por EL NOSTRE CIUTAT el 25 de enero de 2014, a principios del año pasado el censo local registraba nada menos que ¡12.048¡ personas mayores de 65 años, cifra desglosada en 7.137 mujeres y 4.911 hombres. Es evidente que casi dos años después el número de habitantes debe haber descendido por las defunciones que se han producido en nuestra ciudad pero no es menos cierto que la mayoría de quienes en el citado informe tenían entre 60 y 64 años –1.644 varones y 1.750 hembras– muchos habrán alcanzado los 65 años y deben estar formando parte de la gran “filà” de jubilados que viven en Alcoy. También habrá que añadir a estos totales aquellas personas que sin alcanzar los 65 años están prejubilados, o cobran por larga enfermedad con lo cual las clases pasivas somos mayoría absoluta en este pueblo. Si no se crea empleo de verdad los jubilados alcoyanos en el futuro podríamos tener dificultades en el cobro de la “pagueta”, pero como pedía al pueblo en plena guerra civil el político socialista Juan Negrín, aguantaremos “con pan o sin pan”…

Los datos del INE y del Ministerio de Empleo publicados revelan hasta que punto la crisis española ha incidido sobre el empleo y la Seguridad Social. La “creación de empleo” de Mariano Rajoy se ha gastado en cuatro años la mitad de los ahorros de casi diez millones de pensionistas españoles y deja una mala herencia a quien le suceda. Pienso que en el futuro las pensiones irán a menos –la CE lleva años pidiendo que se reduzcan y que se eleve la edad de jubilación– y como la esperanza de vida de las españoles podría mantenerse y nuestras mujeres en edad fértil no parece que estén por la labor de tener más hijos, España acabará convirtiéndose en un país de abuelas y abuelos… pobres.

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