Pero, hemos entendido algo? LORENA LÓPEZ

Quedan apenas 50 días para elecciones locales y autonómicas y el ambiente político está calentando motores, es el momento de estar en la calle, de ser compañeros y lo peor, de hacer ver que escuchan al ciudadano.

En una batalla sin cuartel, a ver quien se acerca más a las peticiones ciudadanas, los partidos políticos, lejos de mirar, escuchar y empatizar con los movimientos sociales que llevan años en la lucha diaria, presentando mociones, y haciendo propuestas a todo aquel que quiera escuchar, parece ser que lo único que les preocupa es el panorama político; el de la institución, el de las nominas, el de los 54 céntimos por voto.

Las personas necesitamos urgentemente un cambio social y político, algunas de nosotras hemos dado el paso a la política con el fin de cambiar la cosas desde la institución como nos lo hacían ver desde el 15M, otras seguimos en el contrapoder tan necesario en una democracia y otras directamente piensan que el sistema está obsoleto.
Con este panorama, yo me pregunto, han entendido algo?
En mi humilde opinión, NO!
Cuando las personas activas en algún movimiento social vamos a la institución, les comentamos los casos de familias en peligro de exclusión social y las propuestas para revertir esta situación que hace la institución?…NADA

Puedo enumerar un sinfín de casos durante los últimos cuatro años, pero se haría muy largo y esa no es mi intención.
Estoy hablando de cuatro años, moviéndome por la institución, todas las semanas, se de lo que estoy hablando…y ahora?
Ahora llega el momento de la buena política, de hacerse “la foto de activista”, de llamar para concertar citas con los movimientos para escuchar sus peticiones, de querer un cambio real en la institución, llega el momento del cambio.

Durante cuatro años, hemos sido las personas de los movimientos sociales los que apoyándonos mutuamente hemos sabido salir adelante.
Ahora, sin ánimos de criticar la labor de la institución, pero si la falta de compromiso por parte de ella, nos llaman a la puerta, una puerta que ha estado abierta durante cuatro años y que por dejadez política ni siquiera se han arrimado.

Todavía queda mucho camino por andar, muchas conciencias por despertar y muchos corazones por conquistar.
Termino mi opinión citando al gran Groucho Marx:
“Disculpen si les llamo caballeros, pero todavía no les conozco bien”