La calçotada, una tradición gastronómica que está de moda
La calçotada es una fiesta gastronómica en alza. Cada vez son más los que se suman a esta ancestral tradición de origen catalán, que gana adeptos no solo a nivel familiar o como una oportunidad más para celebrar y divertirse con amigos. También está moda entre el sector de la restauración, donde muchos establecimientos ven las calçotades como una nueva oportunidad de negocio durante los primeros meses del año.
El Restaurante Torre de Cotes, ubicado en la parte baja de Serelles, es uno de estos establecimientos que ha decidido incorporar la calçotada a su variada oferta gastronómica, que siempre intenta promocionar la cocina tradicional y los platos típicos de montaña, como explica Omar Castañer, gerente y chef del restaurante Torre de Cotes.
La calçotada es una fiesta culinaria típica de la región occidental de Cataluña. Originaria de Valls (Tarragona), en las últimas décadas se ha extendido y puede degustarse en casi cualquier parte de la comunidad durante el final del invierno y comienzos de la primavera. La llamada Gran Calçotada de Valls tuvo lugar el pasado fin de semana, logrando reunir a unas 40.000 personas en la siempre concurrida degustación popular.
Durante la celebración, los denominados calçots –una variedad de cebolletas especialmente cultivada para este propósito– se asan directamente sobre las brasas del fuego y se comen con la mano, aderezados con una salsa especial, la ‘salvitxada’, similar a la romesco. También las brasas se aprovechan para asar carnes o embutidos, que suelen servirse como segundo plato.
Cocidos en su punto, la capa exterior de los calçots se carboniza, dejando el interior tierno y cremoso. Tradicionalmente se llevan a la mesa sobre papel de diario aunque fuera de las zonas tradicionales se ha adaptado, a modo de plato en una teja de barro, que ayudan a conservarlos calientes.
El Restaurante Torre de Cotes de Alcoy adquiere los calçots directamente de las comarcas de Tarragona de donde procede este producto con denominación de origen. Por eso el cocinero indica que para acudir a las calçotades que organizan durante los fines de semana de febrero, es necesaria una reserva previa por parte de los comensales.
FIESTA POPULAR Y REIVINDICATIVA EN BENIARRÉS
En esta zona, hablar de calçotada es hablar de Beniarrés. En este pequeño municipio de El Comtat llevan más de diez años celebrando su calçotada, que cada inicio de primavera se convierte en una fiesta popular y reivindicativa organizada por el Ateneu Popular Arrels de Beniarrés.
La celebración comienza como una celebración de un grupo de amigos y se ha convertido en una fiesta popular que va más allá del pueblo y de la comarca. Año tras año la entidad invita a pasar un día de hermandad y reivindicación, convirtiendo la jornada lúdica y festiva en una oportunidad para denunciar el menoscabo hacia la cultura de los Países Catalanes.