Gobernar para retroceder
Hace unas fechas, tuve el placer de ser participe de una conversación –alrededor de unos excelentes y aromáticos cafés- sobre la conveniencia de seguir siendo gobernados por la derecha, o por el contrario, y para acabar con la sangría que se ha cebado con este país y la sociedad que lo forma, era volver a tener miras más progresistas…
La conclusión que saqué de la misma, es que el camino por donde discurren nuestras vidas, conduce irremisiblemente a la situación que vivimos a mediados -años cincuenta y sesenta- del pasado siglo.
Privaciones, consumo por los suelos, poco trabajo, mal remunerado y con escasos derechos… justamente lo contrario que nuestro esfuerzo –y también el de empresarios, sindicatos, y demás estratos de la sociedad- nos habían llevado a conseguir.
Hoy en día, los trabajadores estamos siendo maltratados, pero también muchísimos empresarios –medianos, y pequeños- que han tenido que cerrar sus empresas, o si han tenido suerte, malviven y la mantienen a duras penas.
Pero no quisiera que un esbozo –otro más- de lo que ocurre, me aleje del tema que quiero exponer.
Desde hace un tiempo hemos podido constatar las diferentes y abundantes maniobras de este Gobierno que nos desgobierna, en el sentido de auspiciar leyes y decretos que van siempre en una misma dirección… no la de hacer avanzar a la sociedad, ni de procurar mejoras para la misma, sino buscando, tan solo, maniatarla, callarla, y someterla…
De entre todos los responsables de este Gobierno, destaca la febril actividad del titular de Justicia, pues desde su Ministerio han salido los proyectos que más nos van a hacer retroceder, como sociedad, y como ciudadanos.
Solo hay que recordar la famosa y aclamada Ley de Tasas judiciales, primera joya de este lujoso collar… ¡Cuántos recursos van a quedar en el limbo de los no pudientes!!!
Hasta puede que, recurrir por recuperar el vehículo que nos sustrajo la grúa, sea más doloso que la propia recuperación. Solo por poner un ejemplo de algo cotidiano.
Uno de los pretextos que esgrime es no cargar más a la ya sobrecargada Administración de Justicia. Aparte del ministro y de sus compañeros y compañeras de bancada… ¿Hay alguien que se lo crea?
Podemos comprobar otra joya cuando leemos a fondo el proyecto de Ley del Poder Judicial…
Pasando solo por encima, es fácil intuir que este proyecto, además de retrogrado, es malévolo, y puede que guarde una estrecha relación con los innumerables asuntos que el P. Popular tiene a medias con la justicia. El refranero español es muy sabio, y conoce como nadie a los nativos de esta tierra… de ahí la seguridad del: “…piensa mal, y acertarás…”
…Tampoco nos olvidamos del “pionero” y estupendo proyecto de ley sobre el aborto…
De nuevo, la España universal, la reserva espiritual, se ha puesto en marcha… Gracias a los amigos obispos, a la ínclita Conferencia Episcopal, gracias señores de derechas que están al frente (y detrás) de nuestro Gobierno… Todos los países evolucionan… pues en este (“Spain is different”), involucionamos.
No se trata solo de que hacemos con las leyes lo que queremos, porque tenemos mayoría absoluta, sino que nos estamos cargando, con una facilidad pasmosa y un cinismo galopante, derechos y formas de vida, plenamente aceptadas y totalmente legales. Es comprensible, hay que tener contento a ese semillero de votos que observa desde las zonas situadas mucho más a la derecha del electorado…
Asimismo, tenemos –ya aprobada- la modificación y práctica eliminación de la Ley de Justicia universal (otra gran aportación de este Gobierno) y que tiene ya las tiene las primeras consecuencias… la puesta en libertad de numerosos narcos… lo que empieza, ya de inicio, a demostrar que vamos yendo velozmente hacia atrás…
Vuelve nuestro país a ser un verdadero paraíso para los delincuentes… Entre esto, y la laxitud de nuestro sistema judicial en cuanto a los casos de corrupción que tenemos entre manos, estamos apañados… ¡La que ha vuelto a liar Zapatero…!
Un buen Gobierno, hubiera gestionado este asunto con serenidad, con autoridad (que no con autoritarismo de mayoría absoluta) con hechuras de buenos políticos…en aras de la verdadera justicia… Finalmente, han demostrado lo que son, pésimos gestores, y peores políticos.
Como casi siempre, mientras escribo, acabo convenciéndome de lo ingenuo que soy, pues ellos pasan de nosotros, y muchos de nosotros les seguimos votando…
Refiriéndonos ahora el Ministerio del Interior, y para rizar el rizo de nuestra vuelta a mediados del siglo XX, (suena así como moderno, pero no lo es en absoluto) vamos a poder disfrutar –si nadie lo impide- de una Ley de Seguridad Ciudadana que solo va a garantizar la seguridad del Gobierno, de la clase política, y de otras especies que todos conocemos.
Sería más acertado denominarla Ley de Represión Ciudadana para Seguridad del Gobierno…
Al ciudadano, pobreza, paro, y mentiras (¡que son en plasma, oye!), y por si fuera poco, ver (lo que nos dejen), oír (lo que les plazca), y callar (aunque te zurren de lo lindo).
Esto es una democracia, sí señor. Lo demás, lo de Francia, Alemania, Holanda, Italia… (Hay tantas, que no acabaríamos nunca), son meros esperpentos…
Nunca, los ciudadanos de un país han merecido ser gobernados por gentes con tan poca empatía con la sociedad en la que habitan…por no hablar de su total desprecio por los ciudadanos….
…y aún siguen con la cantinela de que Zapatero esto, y Zapatero lo otro… y que con la herencia que recibieron no han podido hacer otra cosa… ¿Tendrán realmente capacidad para hacer otras cosas…?
En realidad, están llevando adelante lo que querían, y a fe, que lo están consiguiendo.
Lo que sí está claro es que, con las leyes que tienen proyectadas, y con la gestión del país realizada hasta la fecha, vamos a tardar décadas en recuperarnos de la herencia que van a dejarnos… y ya lo estamos comprobando…ya hace tiempo que sentimos, dolorosamente, los efectos…