Fin de curso de los pequeños actores
Las actrices y actores más pequeños del grupo de teatro Tesalín, del colegio Salesiano San Vicente Ferrer, vivieron en la tarde del jueves unos momentos muy especiales, con el Festival de Primeros Cursos, al que siguió el acto de Acción de Gracias. Todo ello, en un ambiente familiar, de alegría, de despedida y con ese excelente sabor que tiene para los pequeños el saber que las vacaciones están muy, pero que muy cerca.
El Festival se celebró en el Teatre Salesians, y a escena subieron los actores y actrices del Tesalín Infantil con ‘Príncipes, princesas, duendes, hadas y leñadores’, mientras que Tesalín 1º lo hizo con ‘Las jirafas no pueden bailar’, y el Tesalín 2º representó ‘La princesa espacial’, ‘Los árboles que no tenían hojas’ y ‘La maga de Oz’. En total, unos 80 actores y actrices que ya saben lo que es un escenario, los nervios y los aplausos del público, que en algún momento subió para participar en el montaje.
Príncipes y princesas, narradores, habitantes de la luna, animales, hadas, leñadores y duendes, el hombre de hojalata y el espantapájaros, así como el sol, la lluvia y el viento fueron algunos de los personajes –de una larga lista– que participaron en este Festival, presentado por miembros del Tesalín ESO.
Insignias a la colaboración y apoyo
A continuación los asistentes se trasladaron hasta el Santuario de María Auxiliadora, donde se celebró el acto de Acción de Gracias, de la mano del salesiano y director del colegio Salesiano San Vicente Ferrer, Tomás Sánchez, quien animó a los asistentes, especialmente a los pequeños, a compartir los cantos en esta jornada de agradecimientos y despedida.
El presidente del grupo Tesalín, Jorge Ponsoda, tomó la palabra para seguir con los agradecimientos, esta vez a personas y entidades que desde hace años colaboran con este grupo de teatro del colegio Salesiano San Vicente Ferrer, recayendo la insignia de plata de Tesalín en Dimas Vitoria (La Caixa) y en Comesco, que recogieron Cristóbal y Paqui Yepes.
Una foto de grupo en el Santuario de María Auxiliadora y un aperitivo en la Sociedad de Antiguos Alumnos Salesianos cerraron una jornada marcada por la ilusión de los pequeños actores y actrices y de sus familias, compartida con todos los que hacen posible que año tras año el teatro esté presente desde la infancia.