“Espero que el libro sirva para ampliar y aportar a esta temática”
Jose María Soriano Bellver, nacido en Ontinyent, vive en Alcoy desde 1974 y está licenciado en Teología y en Derecho. En la actualidad se encuentra jubilado y es un miembro activo del Centre Alcoià d’Estudis Històrics i Arqueològics (CAEHA), del cual fue presidente. Después de dedicar alrededor de 30 años a finalizar su libro, este año ha visto la luz, y será presentado mañana martes, 21 de marzo, a las 20h en el salón de actos de la Iglesia Parroquial de Santa María. El libro, coeditado por el CAEHA y el periódico El Nostre, narra el proceso de creación y construcción, durante el siglo XVIII y principios del XIX, del segundo templo que los alcoyanos destinaron a la iglesia parroquial: la iglesia de Santa María.
–¿De dónde nace la iniciativa de escribir sobre este tema?
–Soy una persona a la que le gusta mucho la historia y colecciono muchos objetos históricos. Entre estos objetos, hace 30 años me llegaron unos sobres de los curas de Santa María que contenían en su interior información sobre la iglesia de Santa María en el siglo XVIII. Habían manuscritos en los que se mencionaban los curas que había, los beneficios que se sacaban, sobre la situación religiosa, folletos con anunciaciones de actos de la iglesia, visitas pastorales, etc. A partir de aquí me encontré con un puzzle con muchas piezas sueltas, y desde ese momento yo tenía que construir una historia.
Por otra parte, también es importante saber que es un tema del que hay muy poca documentación, ya que esta ha ido desapareciendo a lo largo de los años. A partir de aquí tuve claro que si quería darle sentido a los papeles que tenía, iba a tener que hacer un buen proceso de estudio y documentación.
Desde el principio tuve claro que iba a ser un tema muy arduo para trabajar, debido al lenguaje, la época y la terminología sobre el mundo de la construcción que se utiliza. Los términos no son los mismos que se utilizan ahora, y eso es una dificultad añadida. He recurrido a la ayuda de arquitectos profesionales e incluso para ellos ha supuesto un esfuerzo extra.
–Destaca que tuvo que hacer un buen trabajo de documentación. ¿En qué estuvo basado? ¿Cuándo lo empezó?
–Lo empecé en los años 80, tenía claro que iba a ser la parte más importante del trabajo en el libro y que tendría que dedicarle mucho tiempo. Principalmente la dediqué a reunir toda la información que existía sobre la iglesia parroquial, utilizando como fuentes principales el Archivo Municipal y las secciones municipales.
–Y una vez finalizado este proceso, ¿empezó a escribir directamente?
–No, los procesos de documentación y redacción no estaban separados, más bien iban de la mano, ya que a la vez que encontraba documentos y los estudiaba, unía piezas redactando texto para el libro. Así las cosas cobraban sentido de manera más fácil y podían llevarme a nuevos campos de documentación. Además, publiqué varios de los textos que iba escribiendo en la Revista de Fiestas de Alcoy. A partir de aquí fui redactando el libro de manera intermitente.
–Dice que escribió artículos para la RFA pero, ¿había escrito con anterioridad algún libro?
–Si, en 2013 publique un libro del que fui coautor, el cual se tituló ‘Els antics Gremis d’Alcoi: vessant cívic i religiós: homenatge als gremis i als actuals guions gremials’.
Como curiosidad, cabe mencionar que este libro también lo empezamos debido a la llegada de un objeto histórico a nuestras manos, esta vez, un guión del gremio de la metalurgia.
–Volvamos a tu libro actual. Habiendo una fase nueva de construcción de la iglesia de Santa María tras su destrucción, ¿por qué te has centrado solamente en la antigua?
–Sencillamente porque es la construcción original y prácticamente no había ninguna historia escrita sobre ella ni ninguna descripción. Una de las cosas que me carcomía es que de ésta solo se conocían datos que no eran verídicos, como por ejemplo el autor de su construcción. La gente le atribuía el mérito a Manuel Blasco y el solamente se encargó de construir el templete de la iglesia en el año que se inauguró. El encargado real de su construcción fue el Maestro de Obras José Vilar.
–¿Cómo sigue el libro el hilo de la construcción de la iglesia?
–El libro está dotado de una estructura muy marcada dividida en cinco capítulos. En el primero se realiza un resumen con una recopilación de todo lo que se sabe hasta el momento sobre la iglesia parroquial. De ahí se pasa, en el segundo, a la toma de la decisión de hacer la iglesia y al proceso de construcción. El tercer capítulo trata los problemas que tuvo la iglesia con la colocación de los bancos del Ayuntamiento y de las armas reales. Para finalizar, los dos últimos capítulos se centran en la construcción de los altares, reservándose el quinto en exclusiva para hablar del Altar Mayor. A parte de estos cinco capítulos, he añadido unos anexos en los que podemos encontrar documentación extra.
–Después de tanto trabajo, ¿cuándo finaliza su libro?
–Si te soy sincero, el libro está finalizado desde hace ya 10 años, pero surgió un problema que retrasó su publicación. El Archivo Municipal se trasladó del Ayuntamiento al Centro Cultural y esto provocó desajustes en mi sistema de citación. El sistema que yo utilizaba, hacía referencia a documentos archivados dentro de carpetas, pero cuando los documentos se cambiaron de sitio, se organizaron de una forma diferente a la que yo tenía establecida, y por tanto, los documentos que yo citaba en mi libro, no existían, es decir, no podían encontrarse, ya que no hacían referencia a nada. Debido a esto, tuve que cambiar todas las citaciones que habían en el libro o mi trabajo resultaba inútil, ya que no podía demostrar ninguna de mis fuentes. Cabe comentar, que fue un trabajo menos costoso de lo esperado gracias a toda la ayuda que recibí por parte de los trabajadores del Archivo. Además, aproveché este tiempo para mejorar mi obra, y al final, ha visto la luz y de una forma mejorada.
–Tras alrededor de 30 años de trabajo, ya has publicado el libro, ¿qué sensaciones tienes?
–La verdad es que estoy muy satisfecho de que el libro haya visto la luz y quiero dar las gracias a todos los que lo han hecho posible. Lo que más me llena son todas las cosas que he aprendido, ya que no sabía prácticamente nada. Como ya he mencionado antes, es una temática de la que se ha hablado muy poco, y espero que este libro sirva para ampliar información, para aportar todo lo que he aprendido yo e incluso para continuarlo. Pienso que este libro ofrece muchas futuras posibilidades y muchas líneas de investigación, como por ejemplo la comparación entre las dos construcciones que ha sufrido la iglesia antes y después de la Guerra Civil.
Recomiendo el libro, ya no solo a los amantes de la arquitectura, también a los de la historia, ya que se tratan temas muy curiosos y peculiares de la época como las diferentes mentalidades existentes dentro de la iglesia.