Vive la vida
En estos momentos tan convulsos en los que vivimos no hace falta decir que para sobrellevarlo “Hay que tener más moral que el Alcoyano”. Sólo hay que escuchar las noticias o poner los informativos de cualquier cadena. Hay que armarse de moral, o revestir nuestras almas de un caparazón tan duro como el de las tortugas, para enterarte y seguir comiendo como cualquier cosa. La pandemia que nos acosa, aunque ahora lo hayan dejado como una gripe, la invasión Rusa a su país vecino y la amenaza a los países colindantes, incluso se atreven con amenazar a Finlandia con el consecuente peligro de una guerra mundial. Las escuchas telefónicas a personas importantes del Gobierno incluyendo al propio presidente, la subida continúa de la luz, gas, carburantes, productos básicos de alimentación y uso de los ciudadanos.
Es decir, ha subido todo.
El suicidio es una de las causas más importantes de muerte en nuestro país, violencia de género, violaciones… En resumen, un auténtico caos. Y esto nos hace pensar ¿qué es la vida? Bien cierto es que no vivimos en un paraíso, sino que la vida es dura, por las muchas adversidades que tenemos que soportar a nivel mundial y particular. Esto hace que nos olvidemos de la parte bella de la vida. Mucho cuidado, y que sean los filósofos quienes discutan porqué la vida es como es. Nuestro interés debe de estar en cómo vivirla. ¿De qué nos sirve vivir muchos años si la fustración, el resentimiento, la pena y el pesar nos impide disfrutar de ella ? No hablemos tanto de las dificultades, la enfermedad y malestar. Como un día me dijo una niña, hija de unos buenos amigos. “Si la vida te da limones, haz limonada”.
O recordemos como se hacen las perlas: Cuando un grano de arena entra en su concha, en lugar de resistirlo, la ostra lo recubre con una capa tras otra de nácar, hasta que forma la perla. Así que, vive la vida, disfrútala, mira siempre la parte positiva y no busques un mundo mejor, lucha por hacer un mundo mejor. Y como siempre, un consejo sacado de un versículo bíblico, en este caso del libro de Gálatas 6:4
“Cada uno debe de juzgar su propia conducta, y si ha de sentirse satisfecho, que lo sea respecto de sí mismo y no respecto de los demás”.
Así que con mucho conocimiento y sentido de la vida, vive la vida.