Ureña y Cáceres dan plantón al ayuntamiento

Los atletas de Onil Jorge Ureña y Eusebio Cáceres, participantes en los juegos olímpicos de Tokio, han rechazado participar en la recepción oficial que les había preparado el ayuntamiento de su ciudad natal, a modo de protesta por considerar ambos que no se les ha prestado ayuda para poder entrenar durante el último ciclo olímpico.
Ambos han hecho público un comunicado conjunto en el cual aseguran haberse visto “obligados a rechazar” el acto de homenaje propuesto por el gobierno municipal. “Os pedimos disculpas, porque merecéis que os devolvamos todo el cariño recibido, pero también merecéis sinceridad”, señalan los dos deportistas en referencia a sus vecinos, justificando su decisión por no querer “dar una imagen que no se refleja con la realidad”. “Las condiciones son precarias, las instalaciones insuficientes, tenemos muchas carencias de material y pocas ayudas” denuncian los dos deportistas colivencos, desvelando en su comunicado que han solicitado y propuesto en repetidas ocasiones “planes de mejora que no han tenido respuesta o se han ido demorando sin ser resueltos”.
Ureña y Cáceres se sienten “decepcionados con la pobre implicación que el Ayuntamiento ha tenido con los deportistas”, y desvelan que esta misma semana se han vuelto a reunir con las autoridades locales para hacerles llegar su malestar. “Esperamos que entendáis nuestra decisión, que no solo nos implica a nosotros, sino a los futuros deportistas que alumbrará el pueblo de Onil. Ojalá esta decisión y toda vuestra implicación sea el principio de un gran cambio”, concluyen los atletas.

a las puertas de la gloria
Jorge Ureña es plusmarquista español de heptatlón y excampeón de Europa, y Eusebio Cáceres finalista en salto de longitud en los pasados Juegos de Tokio. En el caso del primero, quedó cuarto en la modalidad de salto de longitud, a escasos tres centímetros de la medalla de bronce, con un registro de 8,18 metros.
Por su parte, Ureña finalizó noveno en la prueba de decatlón, sumando 8.322 puntos, en lo que ha supuesto su debut olímpico. Se quedó pues a un escalafón de conseguir el honroso diploma olímpico.