Una segunda vida para el arte
Alcoy continúa trabajando para recuperar su importante patrimonio cultural
Existe una teoría que habla de la segunda vida de la obra de arte, propuesta por el premio Nobel Eugenio Montale. La primera vida es cuando el artista lo está creando y la segunda es cuando esta obra llega hasta el espectador, y se produce la admiración o el rechazo. Pero sin interacción con el público, no hay arte, por eso es tan importante la labor del profesional conservador/restaurador.
Ángela Molina, que ha trabajado como becaria del Museo Arqueológico de Alcoy, ha sido la encargada de darle una segunda vida a la obra de Lorenzo Casanova ‘Retrato de Doña Teresa Miró’. El objetivo principal de la intervención era lo de la eliminación del barniz no original y capa de suciedad intermedia para devolver la colorimetría original.
Después de limpiar las partículas de polvo y suciedad superficial, se hicieron diferentes pruebas para determinar qué era la mejor solución para eliminar la capa de barniz y el método más efectivo para la retirada de este estrato sin afectar la pintura, fue utilizar una preparación acuosa. Es así como se pudo apreciar la técnica y la amplia paleta cromática utilizada por el artista y algunos detalles, como los blancos de las pupilas y la pincelada utilizada para la carnación ocultos bajo estas dos capas. Finalmente, para proteger la película pictórica de los agentes externos se aplicó una capa de barniz de una resina natural diluida.
El concejal de Patrimonio Cultural, Ignacio Trelis, habla de restauración y conservación como “nuestras armas para prevenir la desaparición de nuestro patrimonio cultural”, compuesto por piezas “únicas”. “Recuperar y conservar estas obras es una de las labores fundamentales de esta concejalía, con el propósito de dar conocer a nuestra sociedad el maravilloso patrimonio artístico que Alcoy posee”, concluye.