Un país necesitado de asesores
El 10N, y como siempre, vamos a votar realmente gestores, eso de ministros, vicepresidentes, etc… suena muy rimbombante, y es posible que nadie de los que después sean nombrados tengan demasiada idea de lo que van a gestionar.
Van a necesitar un ejército de asesores por ello, pero es posible que no hagan falta tantos, pues es de esperar que ellos mismos tengan algo que aportar y no los necesiten para todo.
Tengo claro, pues, que tendremos que pagar dos (o más, según los asesores necesarios para el cargo al que asesoran) sueldos muy generosos por cada uno de esos gestores.
Parece ser que cada cargo lleva adscritos varios asesores, y eso no parece que deje en muy buen lugar a quienes son los que han de gestionar la vida de todos los españoles y españolas.
Si no saben de qué va la cosa… ¿Para qué leches se presentan? ¿Para qué les elige el Presidente? Entiendo que el propio Presidente necesite expertos y asesores para los diversos campos que ha de gestionar a todos los niveles, pero, del cabeza de cartel para abajo, me parece surrealista.
Imaginemos, pues, que las gentes del Gobierno son solventes, que saben que se llevan entre manos… De lo contrario, si para llevar a cabo su cometido han de estar asesorados por otras personas, parece lógico que el cargo lo ocupe una de esas personas. Uno no da para más, y los razonamientos son sencillos.
En un país donde necesitamos de todo, donde las arcas del Estado subsisten de manera precaria (aunque hay partidas que nunca pasan penurias), donde hay que efectuar recortes para los mismos de siempre… ¿Es decente mantener un tejido político que suele gestionarnos deficientemente a pesar de tener en nómina (con el gasto enorme que ello representa) a miles de asesores?
No deberíamos olvidar que sus sueldos salen del Estado, de ese Estado que no tiene dinero para adecuar las pensiones a lo que es digno y justo, ese Estado que tiene bajo su manto a muchas personas (demasiadas) que lo están pasando realmente mal, ese mismo Estado que lleva años tratando deficientemente a quienes más lo necesitan, como son las personas discapacitadas… ¿Quién pone orden y limita el indecente uso y abuso de asesores?
¿Cuál es el mínimo nivel de capacidad para el cargo que debe de ser exigible en ese cargo público, y cual el número máximo de asesores del que poder echar mano?
Puede que todos los males no sean, o fueran, Maduro y su Venezuela, ni Podemos ni el pavor que les produce, ni el gasto que dicen ocasionan los pensionistas, ni siquiera, Cataluña, ese problema que podríamos deducir que se creó interesada e intencionadamente por ambas partes, y ahora estamos viendo las consecuencias.
Por cierto… ¿Cuál es la opinión que tienen los mentados asesores del tema de Cataluña? Lo digo porque puede que también para este asunto sean requeridos sus servicios. Éramos pocos, y parió la abuela.