Un joven talento que brilla con luz propia
Gerard Torró es bronce nacional en patinaje y fue sexto en la Copa de Europa de Zúrich
A su corta edad, Gerard Torró ha cosechado grandes éxitos en el patinaje artistico y en hockey. Con tan solo 13 años, se ha convertido en una joven promesa del deporte local, destacando en dos disciplinas muy diferentes, el hockey sobre patines y el patinaje artístico. Formando parte del P.A.S. Alcoy en hockey y del Club de Patinaje Artístico Santa Rosa, ha demostrado que con trabajo y dedicación se puede alcanzar el éxito en ambas modalidades.
Su primer contacto con el hockey sobre patines fue en el colegio Salesianos donde Gerard se sintió atraído por este deporte. Fue en la escuela del Alcodiam, donde inició su camino junto a otros quince compañeros de clase. En paralelo, el patinaje artístico llegó a su vida a través de su hermana, quien ya lo practicaba. Al acompañarla a los entrenamientos, Gerard descubrió en esta disciplina una forma de expresión distinta y complementaria, y con el tiempo, ha logrado consolidarse en ambos deportes.
Gerard ha cosechado éxitos importantes con el P.A.S. Alcoy, siendo campeón alevín del sector sur y logrando la sexta posición en el Campeonato de España, un logro que pone en valor el trabajo en equipo y la constancia que exige este deporte. Para un joven de su edad, competir a este nivel supone un gran reto, pero Gerard cuenta con el respaldo de una sólida formación deportiva y la inspiración de grandes referentes en el hockey. Su ídolo, Iván Morales, exjugador del P.A.S. Alcoy y campeón del mundo con la selección española, le motiva a soñar con metas ambiciosas, como alcanzar algún día la OK Liga, la máxima categoría del hockey sobre patines en España.
Paralelamente, Gerard ha demostrado tener un talento excepcional para el patinaje artístico, disciplina en la que ha logrado éxitos destacables en diversas modalidades. En la modalidad libre, se proclamó subcampeón autonómico infantil, lo que le permitió competir en el Campeonato de España, donde obtuvo la novena posición. En la modalidad de solo danza, Gerard volvió a brillar, alcanzando nuevamente el segundo puesto en el campeonato autonómico y alzándose con el bronce en el campeonato nacional, un resultado que le abrió las puertas a su primera experiencia internacional, la Copa de Europa.
Este evento continental, celebrado en Zúrich, fue una prueba de fuego para Gerard Torró. Competir a nivel internacional supuso un reto tanto deportivo como personal, pero logró estar a la altura, alcanzando la sexta posición y acumulando una experiencia que seguramente marcará su carrera.
Para su padre, Víctor Torró, este logro fue una recompensa merecida al esfuerzo de horas de entrenamiento, sacrificios y dedicación.
Su participación en una competición de tal calibre “fue un momento muy emocionante para toda la familia”. Ver a Gerard alcanzar esa meta, después de tanto trabajo, llenó de orgullo y alegría a toda la familia. Los padres de Gerard han sido pilares fundamentales en su vida deportiva, acompañándolo en su crecimiento y asegurándose de que pueda disfrutar cada paso de su desarrollo.
Para Gerard, su entrenadora Lucía ha sido una figura fundamental en su vida. Según Víctor Torró, Lucía no solo ha contribuido a su desarrollo técnico, sino que ha sido una guía para su crecimiento personal, ayudándole a enfrentar los retos con madurez y a mantener la concentración en momentos críticos, además de todos los valores que le aporta para desarrollarlos en su vida personal.
Un ejemplo de ello se dio en su último campeonato de España, donde Gerard se encontró con una dificultad inesperada durante su actuación. Un pequeño incidente amenazó con desviar su atención, pero, gracias a su entrenamiento y a la capacidad que ha desarrollado para manejar la presión, logró sobreponerse y completar su ejercicio con éxito. “Es una muestra de su evolución, tanto en lo deportivo como en lo personal”, dice Víctor. Gerard ha aprendido a lidiar con la tensión y el estrés que generan las competencias, desarrollando una mentalidad fuerte y resiliente.
A pesar de su juventud, Gerard Torró tiene claro que el camino hacia sus sueños requerirá mucho esfuerzo. Entre sus objetivos se encuentra competir en el Campeonato del Mundo de patinaje artístico y llegar a formar parte de la OK Liga con el P.A.S. Alcoy. Su reciente convocatoria para las preselecciones de la selección española en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de cara a 2025 es una prueba del reconocimiento que ha ganado en el patinaje artístico. Esta preselección es, sin duda, un hito en su corta pero intensa trayectoria, y representa una oportunidad única para él de entrenar junto a los mejores deportistas del país. “Es un sueño hecho realidad”, afirma con entusiasmo. Aunque esta convocatoria es un paso importante, él sabe que deberá trabajar arduamente para hacerse un lugar definitivo en la selección nacional.
Es un defensor activo del patinaje artístico en España, un deporte que, aunque no goza de la popularidad de otras disciplinas, cuenta con exponentes de talla mundial. Siente admiración por su ídolo, Guillermo Gómez Correas, y reivindica la necesidad de dar mayor visibilidad y apoyo a los deportistas de su disciplina en el país. “Merecemos que se le dé la misma importancia que se le da a otros deportes”, señala.
Su ambición no solo se centra en alcanzar sus propias metas, sino también en contribuir a que el patinaje artístico crezca y sea lo suficientemente valorado. El equilibrio entre el hockey y el patinaje artístico no sería posible sin una planificación adecuada, en la que la familia, el club y sus entrenadores juegan un papel fundamental. La vida de Gerard Torró es la de un pequeño que no solo sueña con llegar lejos, sino que trabaja día a día para lograrlo, consciente de que el camino hacia el éxito se construye con esfuerzo y sobre todo, constancia.