Sonríe
Una de las mejores cosas que nos pueden pasar en esta vida es ser feliz. Puede que estés de vacaciones en la playa, el campo, la casita o en cualquier otro lugar; también se puede dar el caso que ya se te hayan acabado y estés en tu habitual lugar de trabajo. Puedes encontrarte en un hospital ingresado o cuidando a algún ser querido.
Quién sabe las circunstancias que podemos tener cada uno de nosotros, algunos buenas, otros malas e incluso regulares.
Ante cualquier cosa, momento o particularidad de la vida, siempre intento seguir este lema, “feliz con lo que tengo”.
Vivir cada día como si no hubiera un mañana, por supuesto de manera respetuosa hacia los demás y hacia uno mismo.
Estoy convencido que serás mucho más feliz. Sonríe, disfruta de la vida, alégrate por el bien de los demás, goza de cada cosa por pequeña que pueda parecer, sé una persona amable, es decir, sé fácil de amar.
Al mismo tiempo, al sonreír hacemos hasta deporte; bromas aparte, sonriendo estamos moviendo 36 músculos faciales y nos traen muchos beneficios a nuestra vida, cosa que está demostrada por muchos científicos.
Sonreír te hace más feliz, das confianza a la persona que está a tu lado, das muestra de emociones positivas. Te hace ser más seductor, ayuda en el caso de que tengas que pedir perdón a que el otro sea más condescendiente al momento de aceptar tus disculpas. Sonriendo das confianza, fomenta a ganar dinero, es decir, todos aquellos que trabajamos cara al público, bien seas comercial, camarero, azafata, enfermera o cualquier otro oficio, hará que esté a gusto contigo.
Imaginad que estamos esperando unas pruebas médicas, si el médico se acerca a nosotros con una sonrisa hace que nos tranquilicemos, pues lo mismo ocurre con los demás si somos nosotros los que sonreímos. Sonreír es una manera de ser saludables, nos alarga la vida, hace que nos baje la presión arterial, libera adrenalina, endorfinas, cortisol y alguna otra cosa que no viene al caso. Hará que durmamos mejor. Sonreír y ser feliz hará de nosotros hombres y mujeres alegres y lo que es más importante, haremos felices y daremos alegría al que está a nuestro lado y conseguiremos que sonría y así lograremos hacer una cadena de personas felices. Y en este caso voy al ejemplo bíblico del bueno y paciente de Job, que a pesar de todas sus circunstancias de la vida, todavía tiene el ánimo de decirle a Dios. ¡Él hará que vuelvas a reír y que grites de alegría!. Os animo a leer este libro que se encuentra en el Antiguo Testamento y seguro que os dará mucho ánimo a los decaídos, y sobretodo paz y alegría. Querido lector, sonríe.