“Somos el equipo de la moral y hasta el final no nos podemos rendir”
Según Garrido, segundo de Vicente Mir, el domingo ante el Fuenlabrada "hemos de ganar por lo civil o por lo criminal"

Como futbolista fue un central que encontró la horma de su zapato en el Collao y como jugador del Alcoyano, ‘Sandokan’ Garrido, como era conocido, infringía respeto entre sus rivales por su facciones enérgicas y largas cabelleras que enseguida calaron entre la afición. Hasta su llegada a Alcoy, era jugador de un club por año, hasta dos en la misma temporada, pero su identificación con la ciudad hizo que este pucelano que llegó a debutar como canterano en Primera División con el Valladolid, acabara echando raíces aquí. Vino para una temporada y terminó jugando cuatro, formando parte de aquellos años dorados que culminaron con las recordadas eliminatorias de Copa y dos play-off, el último aquel frente al Cartagena y con Bordalás en el banquillo. Hace cuatro temporadas volvió como entrenador de la Fundación. El año pasado llevó al Cadete a la Liga Autonómica y esta temporada empezó en el Juvenil B, hasta que hace un mes el club echó mano de su carisma y experiencia para ser el nuevo ayudante de Vicente Mir. “Con esta plantilla voy a donde sea. Somos el club de la moral y hasta el final no nos podemos rendir”, asegura convencido.
– Hace un mes, Josele González habla contigo y te propone ser segundo de Vicente Mir en el primer equipo. ¿Te lo imaginabas?
– No es la primera vez que he estado ahí a punto de entrar. Con Garitano estuve muy cerca pero al final un directivo no quiso. También con otros dos entrenadores existió la posibilidad. Llegó un momento que dejé de hacerme ilusiones. Ahora se ha dado y estoy muy feliz de aportar mi punto de vista.
– ¿Llegas en una situación crítica y muy complicada?
– Diría que más bien complicada que crítica. Me ha sorprendido para bien lo que he visto en el vestuario. El grupo de trabajo es espectacular. Cada sesión es un espectáculo como trabaja, como se esfuerza esta plantilla, su manera de darlo todo. Tuvimos la recompensa de la victoria en Marbella y en estas dos últimas jornadas se hicieron muchas cosas para haber sacado más de un punto. Sin embargo, en fútbol las dinámicas son muy importantes y cuando estás ahí abajo, la suerte no suele favorecer. Todo lo contrario que un equipo que está arriba, que a veces juega de pena y la mete con el culo y parece el Milan de Sacchi.
– ¿La impresión es que el equipo ha ofrecido una mejor versión contra el Mérida y el Ceuta?
– Creo que el partido del Mérida fue un punto de inflexión. El equipo tuvo el coraje y creyó en la remontada y eso hizo posible que igualara un 0-2 adverso. Luego la fatalidad hizo que viniera ese gol en el descuento, pero todos los que estábamos en el Collao creímos en la remontada. El domingo en Ceuta, igual. Hicimos más ocasiones que el líder en su casa. Su portero hizo tres paradas soberbias y llegamos a ponerle la soga en el cuello, pero al final nos quedamos con cara de tontos después de haber jugado mejor que ellos, pero contra las dinámicas es difícil muchas veces competir. Sería preocupante esta situación si el equipo no se esforzara y pasara de todo, pero no es el caso.
– ¿Hablas del partido de Mérida como un punto de inflexión, pero el equipo sigue sin ganar y una tercera derrota consecutiva el domingo frente al Fuenlabrada podría suponer la sentencia?
– Quedará mucho aún pero es verdad que ante el Fuenlabrada el domingo no podemos fallar. Venimos de jugar dos partidos muy bien, pero ahora toca ganar ya sea por lo civil o por lo criminal, no nos vale otra cosa. Las cuentas están claras, de siete partidos que nos quedan hemos de ganar cuatro, da igual el orden, como si son los cuatro últimos de la competición. Tal y como está actualmente la competición, hasta el final no habrá nada perdido y menos en este club: somos el Alcoyano, el equipo de la moral y hemos de luchar hasta el final
– ¿Se habla mucho de la plantilla, se cuestiona al entrenador, a todos los estamentos del club?
– De la plantilla solo puedo decir que voy con ellos a muerte hasta donde haga falta, no tengo dudas después de verlos trabajar a diario. Las dinámicas en el fútbol pueden ensalzarte, el caso del Mérida, o por el contrario te pueden llevar a la situación en la que estamos nosotros. En fútbol 2 más 2 no son 4 y no nos queda otra que buscar el lado positivo de esta situación. El camino es el correcto y sinceramente pienso que se están haciendo las cosas que tocan. Nadie está mirando hacia otro lado. Solo falta que el factor suerte termine de acompañar y que acabe entrando la pelotita.
– ¿Y Vicente Mir en el centro de todas las dianas?
– Es la ley del fútbol, injusta o no, pero cuando las cosas van mal al primero que se señala es al entrenador. Eso hace que se sienta solo y todas las críticas vayan dirigidas a su persona. También cuando las cosas iban mal con Vicente Parras como entrenador se le llegó a cuestionar. Personalmente pienso que se está siendo injusto con él, es un entrenador muy trabajador y meticuloso, el problema es que todo lo que se está trabajando no se ve reflejado en los partidos.