Setenta familias de Alcoy se unen para acoger refugiados

Colaboran con la asociación local Tareg para traer ucranianos y procurarles todo lo necesario

Setenta familias de Alcoy se unen
Romualdo Coderch, Rafael Conca y Herminio Álvarez son miembros de la asociación Tareg.

La Asociación Alcoyana Amigos de Refugiados de Guerra, Tareg, lanza una campaña bajo el título ‘100 por una’, que significa “cien familias alcoyanas por una ucraniana”, explica el portavoz de la entidad, Rafael Conca. La iniciativa ya cuenta con el respaldo de 70 familias, habiendo logrado ya traer a seis personas refugiadas, una pareja con sus cuatro hijas de entre 7 y 15 años, y tenían previsto que esta semana llegase a Alcoy otra familia de cinco miembros.

Una vez en la ciudad, Tareg se encarga de procurar a estas personas exiliadas de la guerra, todo lo necesario para “integrarse” en la sociedad alcoyana. Así, detallan que con esta primera familia, la forma de proceder ha sido empadronarles y documentarles primero, para después buscarles una vivienda de alquiler, que costea la propia asociación. También han sido escolarizados los hijos, a la vez que se les ofrecerá clases de español y colaborarán en la búsqueda de empleo.

Según explican, por ahora se financian con fondos propios a partir de las cuotas de las familias asociadas, aunque cuentan con la colaboración de instituciones también implicadas en la ayuda a refugiados de Ucrania, como Cruz Roja, Cáritas o el propio departamento de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Alcoy. También participan en el proyecto la parroquia de San Roque, donde han escolarizado a los hijos de esta primera familia, y del Club Rotary.

Tareg fue creada hace siete años a raíz de otro conflicto armado, pero se ha reactivado ahora tras la invasión rusa a la vecina Ucrania. Precisamente, la primera familia a la que está ayudando la asociación procede de Donetsk, ubicado casi en la frontera con Rusia. De este modo, para llegar a Polonia tuvieron que atravesar todo el país, con lo que ello conlleva. Desde allí viajaron hasta Barcelona y luego a Valencia, donde les derivaron a Alcoy gracias a las gestiones de Tareg. El objetivo es sumar cuantos más apoyos para la causa mejor, para traer al mayor número de familias ucranianas posibles.

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