Preocupa el creciente abuso de los cigarrillos ‘vaper’ entre adolescentes
Más de 1.500 alumnos de doce centros escolares participaron el año pasado en actividades de prevención
La moda del ‘vaper’ lleva tiempo instalada entre los jóvenes alcoyanos. Estos artilugios son dispositivos electrónicos diseñados para simular la experiencia de fumar tabaco convencional. Algunos contienen nicotina, otros no. Además de este compuesto, pueden presentar diferentes sabores (menta, frutas, tabaco, chocolate, vainilla, etc) y otros aditivos que pueden ser potencialmente nocivos para la salud.
El problema, según explican desde la UPCCA (Unidad de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas), es que los cigarrillos electrónicos dan la falsa percepción de que, a diferencia del tabaco, son inofensivos para su salud. Sin embargo, esta nueva moda no es inocua, “engancha a los chavales, con el peligro de que puede convertirse en la puerta de entrada hacia el tabaquismo”, lamentan.
Además, están observando que la edad de inicio a esta práctica se está adelantando entre los adolescentes, detectándose casos de consumo a los 10 años. “La investigación ha demostrado que el desarrollo del cerebro continúa hasta los 20 años de edad, y que la edad de inicio en el consumo de drogas es un factor de riesgo muy importante para el desarrollo de la adicción”, explica Alicia Becerro, educadora social de la UPCCA.
Está ocurriendo con los cigarrillos electrónicos y, en menor medida, con el tabaco, pero también con las nuevas tecnologías, por lo que se hace necesario también avanzar los programas de prevención dirigidos a escolares, que en la actualidad empiezan en 5º curso de Primaria (10-11 años).
Así, en el marco del plan escolar de prevención de drogodependencias que lleva a cabo la UPCCA, a lo largo del pasado año se impartieron diferentes charlas en centros educativos de Alcoy, centrándose en esta ocasión en el mal uso y adicción de las nuevas tecnologías.
Por lo que respecta al ámbito educativo, se obtiene un feedback verbal con los agentes implicados y se recogen las opiniones de las personas que han coordinado y participado en la actividad, sirviendo esto para, en la planificación del próximo curso escolar, adecuar las propuestas y mejoras recibidas, que son trasladadas a las reuniones de inicio y final de curso.
En total se han hecho actividades formativas en doce centros escolares, con un total de 1.551 escolares participantes. Las actuaciones en los centros escolares se llevan a cabo adaptándose el contenido a la edad del alumnado, trabajando especialmente en la prevención y buen uso de las nuevas tecnologías, prevención del consumo de alcohol, cannabis, e información sobre drogas.
Existe, por ejemplo, un programa que permite trabajar la prevención de las adicciones y sensibilizar al alumnado sobre la importancia de adquirir y mantener hábitos de vida saludables a través de un eje vertebrador potente y atractivo como es el cine. “Desde el punto de vista de la prevención es fundamental trabajar, desde edades tempranas, con programas de habilidades para la vida y programas de prevención con continuidad a lo largo de los ciclos escolares y no solo actividades puntuales”, remarcan.
Al mismo tiempo, se desarrollan programas en colaboración con entidades u organizaciones que también trabajan en el campo de la prevención y el tratamiento de las adicciones, como puede ser la Fundación AEPA, la FAD Juventud –anteriormente Fundación de Ayuda contra la Drogadicción–, el departamento de salud del área, que se implica en la prevención del tabaquismo, así como el GARA, que imparte talleres sobre alcoholismo.