Partido de alto voltaje en el Collao
El Real Unión llega habiendo ganado sus dos últimos compromisos
Partido de alto voltaje esta tarde (17 horas) en el Collao, de esos que tanto gustan a la afición blanquiazul y que tan reiterados se han hecho esta temporada por la situación en la tabla de los de Vicente Parras, que llevan más de media liga al filo de la navaja, en especial en los dos últimos meses, donde cada duelo en casa era casi como una final para el Deportivo.
La visita del Real Unión acentúa más si cabe esa sensación, puesto que los de Iñaki Goikoetxea –tercer entrenador que se sienta esta temporada en el banquillo irundarra– son un rival directo que solo está a tres puntos y la sensación de que son un equipo renacido tras esas dos victorias consecutivas, algo que el Alcoyano no saborea desde aquel lejano primer mes de competición donde todo le sonreía a los blanquiazules, que eran líderes.
Estos partidos adquieren una relevancia mayor, porque no es solo sumar frente a un rival directo, también se debe tener en cuenta que son puntos que le quitas. El Alcoyano no anda precisamente sobrado en los averages particulares con los equipos de su liga. Lo tiene perdido con el Intercity y Nàstic (falta el partido de vuelta) e igualado con La Nucía y At. Baleares. Con el único que lo tiene a favor es con el Real Unión, después de esa victoria 1-2 en Irún con gol de Juanan a diez minutos de la conclusión.
Los de Vicente Parras afrontan este duelo frente al Real Unión con sensaciones contrapuestas. En las dos últimas jornadas –frente al líder Eldense y en casa contra La Nucía– se quedaron en el camino cuatro puntos que en partidos como los de esta tarde, se echan de menos no tenerlos para afrontarlos sin la sensación de que sea un choque a cara o cruz.
Parras podrá poner a su once de gala con la recuperación de Lillo. El de Aspe se quedó sin jugar frente a La Nucía pensando que para esta semana estaría en perfectas condiciones de la lesión de hombro que se produjo en Elda. Todo apunta a que habrá cambios en los dos costados de la zaga. Soler cederá su puesto a Lillo y lo mismo hará Lobato con Pablo Carbonell.