Opiniones
Repasando el libro del mismo título que el que encabeza este artículo he podido comprobar lo poco que hemos cambiado, para bien, en el paso de los años.
Es un libro escrito por mi suegro D. Adolfo de Silva, el cual se encuentra ya en la presencia del Señor; son una recopilación de artículos que salían en el desaparecido Ciudad. Trataba temas de actualidad, tanto de Alcoy como del resto del planeta. Siempre visto desde un fondo cristiano y acompañando sus líneas con versículos bíblicos. Por eso entenderéis ahora de donde viene mi estilo a la hora de escribir.
Empezamos por el anglicismo ¨ zapping ¨ palabra que ya pertenece a nuestro idioma, todos de una manera u otra lo practicamos, yo antes era un experto pero como ahora hay varias cadenas que tengo vetadas lo utilizo menos y me ahorro pilas del mando. El problema en sí no es el cambio de diferentes programas de televisión, si no el tiempo que pasamos delante del televisor que muchas veces no nos deja estar con la familia, con los amigos o poder leer u otra cosa más lúdica que estar delante de la caja tonta. Cada vez hay más personas que viven en la soledad, que sólo tienen como compañía a ese televisor, los jóvenes que viven anclados a sus teléfonos móviles, sin comunicarse con los demás. Y que muchas veces esa soledad lleva hasta puntos horribles en los que prefieren morir. El suicidio es la primera causa de muerte entre nuestros jóvenes y es algo para estar muy preocupado.
Las catástrofes que llevamos viviendo sin parar. Si hace unos años hablábamos de las Torres gemelas, la guerra de Yugoslavia, y muchas más por causas naturales, en estos últimos años no hemos parado, desde la interminable guerra de Siria, las continuas amenazas de las grandes potencias, la hambruna en Somalia y cada día en más países, terremotos en Ecuador, Nepal, Haití, el tifón de Filipinas y lo que vuelve a ser, como en los antiguos años, el comercio de esclavos. Todos aquellos que nos llegan a Europa desde la zona sub saharaui del África. Gentes que vienen con falsas esperanzas, arriesgando sus vidas para el beneficio de unos pocos. Menores de edad en su mayoría huérfanos que están en centros hasta que cumplen la mayoría de edad y quedan solos y sin saber que hacer y que al final, la gran parte de ellos se dedican a la prostitución en la parte norte de Italia, sur de Suiza, así como de Alemania. Guerras que ya no les damos importancia, Centroáfrica, Nicaragua, explotación de niños !tantos países que pasan hambre!. Todos los que sobreviven sin papeles. Hemos perdido el pudor, la educación, el respeto por las personas por la vida. Lo que está escrito en este libro Opiniones desde finales de siglo pasado a principios del que nos encontramos hace que me sonroje de vergüenza al ver que no hemos mejorado nada, lo que es peor, que cada día vamos a peor.
Pero la esperanza es lo último que se pierde. Y yo espero que algún día pueda tener mi propio libro de todos mis artículos escritos en nuestro periódico El Nostre y que la gente al leerlo puedan dar gracias a Dios de que todas las desgracias han acabado, de que hemos aprendido de errores pasados y que nuestra vida es mucho mejor.
Y espero con ansiedad que se hagan realidad las palabras de nuestro Señor a Jeremías, que le decía: Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.
Si viviéramos según sus escritos, ya sería una realidad.