Muchos artesanos no podrán optar a las ayudas de la Generalitat

La Generalitat Valenciana ha publicado recientemente las bases de las ayudas para artesanos festeros como consecuencia de la Covid-19. Estas subvenciones forman parte del ‘Plan Resistir’ y están dotadas de un total de 7 millones de euros.

Estas subvenciones tienen como objetivo conceder ayudas directas urgentes para apoyar a los artesanos y las pymes artesanas vinculadas al mundo de la fiesta, como es el caso de los Moros y Cristianos, puesto que la suspensión de estos festejos ha paralizado la actividad de diversos de los sectores relacionados como diseñadores o metalistas, entre otros muchos.

Desde la Asociación de Artesanos de Moros y Cristianos de Alcoy (AMICA), entidad creada hace unos meses con el propósito de agrupar al sector y darle voz, su presidente, Modesto Moiña afirma que “esperábamos una ayuda directa para los sectores de las fiestas de Moros y Cristianos”, puesto que considera que las bases marcadas y los requisitos están enfocados principalmente “para falleros”.

Desde la Generalitat se indica que estas ayudas contemplan oficios artesanos vinculados a las fiestas populares como los dedicados a la elaboración o fabricación de abanicos, alpargatas, bastones bordados, artista bolillero, medias, ganchillo, muebles y otros objetos de mimbre, caña, palma y similares. Además, se incluye al artista fallero, florista artesano, bodeguero, bastonero, constructor de instrumentos de cuerda, viento y percusión, estampador de telas, dorador, hojalatero, joyero, maquetista, orfebre, escribano, pirotécnico, platero, así como artesanos a medida como sastre, modista, tejedor, sombrerero, tintorero, zapatero o peletero.

CONTAR CON EL DCA
Moiña apunta que uno de los requisitos estipulados en estas ayudas de la Generalitat es contar con el Documento de Calificación Artesana (DCA), que no es necesario para trabajar para los Moros y Cristianos, por lo que hay muy pocos artesanos festeros de Alcoy y de la zona en general, que cuenten con él, y los pocos que aparecen en el registro pertenecen al sector de la piel y cuero; metal o textil, entre otros ámbitos relacionados con la Festa.

El presidente de AMICA indica que “desde el Ayuntamiento de Alcoy se han ofrecido a ayudarnos para obtener el DCA”, con la intención de optar a estas ayudas y cumplir con las bases estipuladas, pero que sin cumplir este requisito, “de las 17 personas que somos, de momento solo podrían optar 3 o 4”.

Moiña considera que “si esta ayuda es para la gente que vive de la Fiesta se podría haber facilitado otro tipo de acreditación”, puesto que el DCA lo otorga la propia Generalitat. Desde el Ayuntamiento se indica que las bases contemplan otro documento equivalente emitido por una administración pública que acredite su condición artesana, además de que los artesanos deben ejercer su actividad, al menos desde el 1 de marzo de 2020.

AYUDAS “INSUFICIENTES”
Asimismo, el presidente de AMICA califica estas ayudas de “insuficientes”, y es que la cuantía ascenderá a un máximo de 7.000 euros para los beneficiarios, pero que “después tienes que estar un año abierto. Si se celebrasen las fiestas sería viable, pero si no se celebran es complicado porque tenemos que seguir abonando los gastos fijos”, que indica que suelen ser superiores a esa cuantía máxima estipulada.

Además, en este sentido, recalca que a diferencia de otros sectores, los que trabajan para las fiestas “llevamos un año cerrados, otros han podido trabajar en algún momento. Somos el único sector al que no se nos ha permitido facturar nada, no se nos ha permitido trabajar”, debido al aplazamiento de numerosas fiestas de Moros y Cristianos.

Además, Moiña apunta que por ejemplo, los profesionales encargados de los caballos, también vinculados con las fiestas, no aparecen en estas ayudas autonómicas.

A pesar de todo ello, el presidente de AMICA trata de verle el lado positivo a estas ayudas, siendo un apoyo para el sector, pero insiste en que, debido a la relevancia de las fiestas de Moros y Cristianos en todo el territorio de la Comunitat Valenciana, se esperaban una ayuda directa y que ahora mismo los artesanos festeros están a la expectativa de poder obtener el DCA y optar así a las ayudas de la Generalitat.

Sobre esta línea de subvenciones trató una reunión mantenida esta semana entre el alcalde de Alcoy, Toni Francés y la concejala de Fiestas, Carol Ortiz y diversos representantes de AMICA, donde precisamente el consistorio ofreció su ayuda a los artesanos festeros para gestionar el DCA.

PLAZO PARA LAS SOLICITUDES
Respecto a las solicitudes para estas ayudas, se deberán presentar de manera telemática en la sede electrónica de la Generalitat, a través del procedimiento habilitado al efecto (http://sede.gva.es), accediendo a la GUÍA PROP, ‘Trámites y servicios’. Cualquier solicitud presentada siguiendo un procedimiento diferente del descrito, será inadmitida.

Solamente se presentará una solicitud por empresa. Respecto al plazo, se iniciará el 1 de marzo de 2021 y finalizará el 15 de marzo de 2021.

En el DOGV se pueden consultar las bases completas y los oficios que pueden acogerse a las ayudas: http://www.dogv.gva.es/datos/2021/02/17/pdf/2021_1393.pdf.

SUBVENCIONES LOCALES
Por su parte la edil Carol Ortiz, apunta que “desde el Ayuntamiento ya abrimos una línea de ayudas para los artesanos de la fiesta, porque sabemos por las dificultades que esta pasando este sector. Ahora estas ayudas les podrán beneficiar y favorecer en esta situación tan complicada que les está tocando vivir, ya que la gran mayoría no pudieron tener ingresos durante el pasado año ni por ahora en este 2021. Todos sabemos que el esplendor que cada año demuestra la Nostra Festa es, en una parte muy importante, gracias al trabajo que desarrollan los artesanos. Esperamos que estas subvenciones ayuden a mantener la actividad empresarial”.

En este sentido, cabe recordar que las citadas ayudas del consistorio alcoyano fueron concedidas a 17 artesanos de los Moros y Cristianos de Alcoy con un total de 74.000 euros, y que precisamente buscaban paliar, de alguna manera, las repercusiones económicas derivadas de la no celebración de estas fiestas a causa del nuevo coronavirus.