Miguel Vidal, el arquitecto que brilla en el concurso de Fuegos de Autor de Pamplona
Ha participado en el certamen internacional de diseño pirotécnico celebrado durante las fiestas de San Fermín
Miguel Vidal es un vecino de l’Alquería d’Asnar que ha participado en el certamen internacional de diseño pirotécnico celebrado durante las fiestas de San Fermín en Pamplona, y ha conseguido ganar el segundo premio, el ‘San Fermín de Plata’, gracias a su creación que se pudo ver en la capital navarra.
Aunque profesionalmente trabaja como arquitecto en Alcoy, Miguel Vidal siempre ha tenido como pasión la pirotecnia gracias a los Dimonis Rafolins de l’Alqueria d’Asnar, y a veces participa con la Pirotecnia Aitana de Bèlgida en algunas colaboraciones puntuales como las Fallas de València, el castillo de fuegos de artificio de la Adoración de la Cabalgata de Reyes Magos de Alcoy 2022, o en la presentación del cartel de Moros y Cristianos de Alcoy de este mismo año. Ahora, ha participado por primera vez en un concurso internacional de diseño pirotécnico, los ‘Fuegos de Autor’ de Pamplona, que se celebran durante las fiestas de San Fermín, y allí ganó el segundo premio. “Pensábamos en resaltar el trabajo de diseño de pirotecnia, y desde Pirotécnica Aitana, me comentaron que querían que fuera yo el que hiciera el diseño de este castillo y representarlos”, cuenta Vidal, que además explica que para participar en este certamen, los organizadores son los que envían una invitación.
En este castillo que tuvo una duración de unos 14 minutos se utilizaron más de 500 kilos de pólvora, y todo este material pasó por un trabajo muy interesante: “Por un lado, se tiene que elegir el material que va a dispararse, y siempre hay un presupuesto del cual no puedes salir. Después cuando ya se han elegido los artificios se tiene que dar un sentido. Por ejemplo, en este había unas pruebas obligatorias, como 30 segundos de efectos en blanco y rojo, colores que representan los San Fermines; y posteriormente otra de las pruebas era que tenía que tener una composición asimétrica, porque de normal los castillos suelen ser muy simétricos, empiezan desde el centro, y queríamos que aportara algo. La complejidad es que la gente entienda que lo que está viendo es parte de un diseño”. Para poder ver el efecto, Miguel Vidal indica que se utilizan unos programas de visualización, y que en este castillo en concreto había más de 1.800 líneas de tiro que se tenían que programar en el segundo que tocaba.
Una vez que estaba todo preparado, fue el momento de presentar al mundo su trabajo en Pamplona. En este concurso participaban 9 pirotecnias de 5 países diferentes, y como ya se ha dicho anteriormente, este vecino de l’Alquería d’Asnar consiguió el segundo premio junto con la empresa de Bèlgida, y, en primer lugar, quedó el italiano Federico Tibaldi. Cada día de estas fiestas era el turno de cada participante, y Miguel Vidal tuvo que mostrar su trabajo el día 9 de julio. “El lugar de tiro es espectacular, con unas medidas que permiten que haya muchos puntos de disparo, en este caso, había 13. Para ganarnos al jurado trabajamos mucho estas dos partes obligatorias, y decidimos utilizar una base rítmica con la Fanfarria Pamplonesa que creamos con los truenos”.
“Teníamos esperanza porque cuando acabamos vimos que había salido todo bien, que a la gente le había gustado mucho, y el jurado nos gritó para comentarnos que les habían gustado esas partes y cómo se había enfocado. La esperanza siempre está pero también teníamos dudas porque los otros también hicieron unos castillos muy buenos”, ha confesado este arquitecto.