Medidas de seguridad para volver a vivir experiencias
La nueva normalidad en las Escuelas de Verano
Vuelve el tiempo de juego, de reencuentros y de aprender descubriendo. Tras un periodo de cuarentena provocado por el Covid, se han retomado las escuelas de verano. A través del AMPA CEIP El Romeral se está llevando a cabo l’Escoleta d’Estiu contando con la colaboración de D*3 Extraescolares. Un año diferente, pero siempre con actividades para que los pequeños puedan pasarlo bien y los padres tengan un respiro. Con la nueva normalidad, los monitores han realizado cursos específicos, de prevención de riesgo y de Covid con el fin de cumplir con todas las medidas de seguridad.
Con estas normas, los niños y niñas están divididos en función de las edades, y en función de los aforos limitados. “Antes podía haber un máximo de nueve alumnos y un monitor, ahora están permitidos grupos de quince y un monitor, pero como máximo hemos sido doce más monitor, y otro de apoyo si son grupos de infantil”, explica Jenny Ramírez, organizadora y monitora de D*3 Extraescolares.
Además de grupos más reducidos, se utilizan varios espacios para que los diferentes grupos no se mezclen, a excepción de los días que van a pasar la mañana a la piscina. Por otro lado, cada niño tiene un aula establecida, así como con su propio material y una silla asignada durante los talleres y en el comedor.
Las salidas y las entradas son por lugares diferentes, teniendo un mayor control donde pueden tomar la temperatura antes de la entrada, pulverizar el calzado con alcohol y tomar la temperatura. Así mismo, es obligatorio que los niños y niñas lleven mascarilla a partir de los 6 años y se desinfecten las manos con gel hidroalcohólico. Los monitores desinfectan las zonas donde han estado, así como los aseos cada vez que entra un niño y todo el material utilizado al finalizar de la mañana.
Uno de los puntos fuertes de la escuela de verano de El Romeral es la programación ten variada que realizan. Desde el 22 de junio hasta el 31 de este mes, llevan a cabo diferentes actividades para que los niños y niñas disfruten al máximo. Taller de manualidades, cine, deportes alternativos, fiestas del agua o recetas son algunas de las actividades, pero también excursiones como al Museo Explora para descubrir la historia de la ciudad. La Bruja Xocolata o El Mago Hugo también han acudido al centro para entretener a los niños. “Todo lo que nos ha permitido hacer la distancia social y esta nueva normalidad lo hemos hecho y la verdad es que los niños y los padres están encantados”, explica Ramírez.
La diferencia más grande con otros años ha sido la fiesta del agua. Otros años los monitores hinchaban piscinas por todo el patio, pero esta vez esa actividad se ha convertido juegos de agua, permitiendo una mayor distancia social. Otra de las diferencias son las actividades conjuntas, “mezclar edades y unir a distintos grupos era muy bonito, pero esta vez no se ha podido hacer”, lamenta la monitora.
Ramírez ha notado que los niños tenían muchas ganas de verse, “nos está costando un poco que cumplan con la distancia de seguridad, sobre todo en niños menores de 6 años”, por lo que han creado ‘grupos burbuja’ para que puedan prestarse cosas y puedan tener contacto.
Por toda esta labor, las escuelas de verano son importantes, ya que “los padres necesitan conciliar vida laboral con hijos y más este año”, asegura la organizadora y añade: “tenemos la necesidad de que los niños se diviertan y se relacionen y todos los niños tienen derecho a disfrutar del verano viviendo experiencias”.