La singularidad de Luis Piedrahita, convertida en risas y aplausos
El gallego se metió al público en el bolsillo desde el primer momento
El humorista, mago y showman gallego, Luis Piedrahita, estuvo ayer en Alcoy, en el recién estrenado Alcoi Plaza Teatre (Teatro Salesianos).
Desde el primer momento, incluso antes de que arrancase el monólogo, Piedrahita –uno de los humoristas más reconocidos de este país– involucró al público en el espectáculo invitándoles a escribir en un papel aquello que deseasen y que lo metiesen en una caja que había sobre el escenario, y que posteriormente se convirtió en el cierre del monólogo, minutos antes de que todos los presentes despidiesen al humorista entre sonoros y largos aplausos, los mismos con los que fue recibido.
Con su inigualable y singular ‘toque’, Piedrahita unió sus mejores monólogos en ‘Stand-up comedy’, un formato procedente de Estados Unidos, a través del que el también colaborador y creador del programa televisivo El Hormiguero, habló de numerosos temas –con su habitual y amplio don de palabra, teniendo que explicar alguna de ella desde el humor–, hilados a la perfección entre ellos e implicó al público en todo momento, hasta el punto de que las llegadas de aquellos rezagados, una vez empezado el monólogo, se convirtieron en momentos de apuros para ellos y en risas para los que ya estaban sentados, como primera muestra de su capacidad de improvisación, que se vio también a lo largo de los minutos.
Un teatro lleno disfrutó de Luis Piedrahita, de su humor, pero también de su magia, ya que no desaprovechó una baraja depositada en la caja anteriormente citada para hacer un truco de magia con diversos asistentes como ‘colaboradores’ y en el que adivinó las cartas elegidas por los mismos. Este fue el punto final del espectáculo de hora y cuarto de duración, que se prolongó con los aplausos recibidos.