La Semana Grande del Piano deja de nuevo un grato recuerdo
El viernes pasado fue clausurada en el Salón Rotonda del Círculo Industrial la VI Semana Grande del Piano, un festival internacional de música que desde 2012 organiza la Asociación de Amigos de la Música de Alcoy con el patrocinio de la Diputación Provincial de Alicante y la colaboración de diversas instituciones, como el Ayuntamiento de Alcoy y el mismo Círculo, el cual este año cumple su 150 Aniversario y por ello han habido distintos componentes extraordinarios, como la actuación, por segunda vez en Alcoy en cuatro años, del famoso pianista nacido en Belgrado en 1958 y nacionalizado en Croacia, Ivo Pogorelich. La Semana Grande se salda de nuevo con un importante éxito medio de público, quién ha podido gozar de cinco conciertos de extraordinaria calidad artística, y que ha contado con asistentes de varias procedencias nacionales (Alicante, Bilbao, Zaragoza, Valencia o Madrid) incluso del extranjero (Corea del Sur y Noruega), lo cual es un indicador de la repercusión de este ciclo pianístico.
TRÍO VENA DE BUDAPEST
Este singular conjunto húngaro formado por tres formidables artistas, Erzsebet Hutás, violín, Kamila Slodkowska, violonchelo y Andrea Fernandes, piano, inauguraron la Semana el lunes 4. Con la interpretación de obras de Haydn, Mendelssohn y ‘Las cuatro estaciones porteñas’ del argentino Astor Piazzolla, el trío mostró siempre una exquisita conjunción sonora. Fue una ocasión única para escuchar una de las más bellas obras de Piazzolla, música que nos transportó al más genuino Buenos Aires.
IVO POGORELICH
Siempre se crea expectación ante una actuación de este controvertido pianista, fulgor mundial musical de los años 80 del pasado siglo, y hoy una auténtica leyenda pianística que continúa cautivando al público. El recital del pasado martes 5 fue verdaderamente portentoso a nivel técnico, con unas inmensas interpretaciones tanto en lo sonoro como en lo emocional, de la ‘Sonata Appassionata’ de Beethoven, ‘Tres estudios de ejecución trascendental’ de Liszt y ‘La Valse’ de Ravel, donde los ‘glissando’ finales sonaron atronadores. Pogorelich es un genio del piano y él y público lo sabemos; no ejecuta con malabarismos innecesarios, entregándose única y exclusivamente a una interpretación particularísima, pero que alcanza sonoridades y expresividades espectaculares que solo con un artista de esta dimensión se pueden lograr. ¡Inolvidable!
ANNA MAGDALENA KOKITS
El tercer concierto, el del día 6, tuvo como protagonista a una de las pianistas jóvenes con mayor proyección internacional en Austria. Sensibilidad, buen gusto y excelente conexión con el público, son justos adjetivos a una percepción interpretativa que desbordó generosidad en lo expresivo, resultando notable en lo técnico. Obras de Beethoven, Janacek, Debussy (una auténtica delicia en las manos de esta artista), Grieg, y la siempre fascinante ‘Rapsody in Blue’ de George Gerswhin, obra que requiere de un ritmo con aire de ‘blues’ o ‘jazzistíco’ que la pianista consiguió sin problemas, emocionando a todos los asistentes quienes se pusieron en pie al finalizar.
UN DELICIOSO RECITAL LÍRICO
El jueves 7, fue el turno para la soprano Belén Roig y el pianista Juan Gadea, profesor del Conservatorio de Alcoy. Ambos nos ofrecieron un recital con obras magníficamente escogidas: canciones, arias de ópera y romanzas de zarzuela que hicieron las delicias del público. Como es habitual, el pianista de Muro fue el mejor acompañante que podía tener la cantante valenciana. Tocó con sabiduría, profesionalidad, y en perfecta armonía con la acompañada. Belén Roig es una soprano lírica con facilidad en la coloratura que extrajo lo mejor de sí para cantar con delicioso gusto. Sólidas ejecuciones de ‘Manon’ de Massenet’, ‘O mio bambino caro’ o ‘La boheme’ de Puccini, ‘Carceleras’ de Chapí o’Cecila Valdés’ de Gonzalo Roig, una hermosísima zarzuela cubana, cuya más famosa romanza fue cantada con garbo y auténtico sabor afrocubano.
ALFREDO FERRE, UN VIOLONCHELISTA DE LA ‘TERRETA’
A sus 24 años es ya un firme aspirante a ocupar los primeros escalafones musicales en Europa y por consiguiente en España, poseedor de una impresionante biografía pese a su juventud. Nacido en el Elda y vinculado familiarmente a Banyeres y Alcoy, toca un violonchelo Stefano Scarampella (Mantua, 1905), cortesía de la Foundation Boubo-Music. Su talento es innato, es muy creativo, y de su instrumento emana una desbordante musicalidad que cautiva rápidamente en el oyente. Éste, el del pasado viernes 8, ha sido sin duda uno de los mejores conciertos desde que se creó la Semana Grande del Piano. Estuvo acompañado por la admirable pianista canadiense Alice Burla, quién ya en la primera parte nos deleitó con un armonioso Schumann. Alfredo Ferre, junto a la pianista, interpretó una asombrosa, enérgica y apasionada ‘Sonata para violonchelo y piano’ del francés Cesar Franck que entusiasmó a los asistentes, poniéndolos en pie. Antes, pudimos escucharle en la ‘Suite I BWV 1007’ de J. S. Bach y en el bellísimo ‘Adagio affettuoso’ de la Sonata Op. 99 de Brahms.
La clausura tuvo asimismo como asistente al Diputado de Cultura, César Augusto Asensio, quien en su intervención tuvo palabras de felicitación al Círculo Industrial por su aniversario y para la Asociación de Amigos de la Música de Alcoy por sus 35 años y por la organización de este evento anual que ya forma parte indiscutible del organigrama cultural de la Diputación de Alicante, como una de las citas musicales más interesantes que anualmente se promueven en la provincia y por extensión en la Comunidad Valenciana.
Fotos: Juan Vilaplana