La pandemia, vivida y contada por una alcoyana que reside en Italia

Italia es uno de los países más afectados por el nuevo coronavirus. Los primeros casos se detectaron en el norte del país, zona en la que precisamente se encuentra desde hace aproximadamente un año la psicóloga alcoyana Arancha Vercet llevando a cabo un servicio civil en la Cruz Roja italiana, mediante el que realiza trabajo de acompañamiento a pacientes al hospital y también de “apoyo emocional en el caso que sea necesario”.

El 21 de abril era el día que aparecía en su billete de avión para volver a España. “Dada la situación de gravedad me aconsejaron retrasar el vuelo ya que la situación probablemente se alargaría todo abril y lo más probable es que me cancelaran el vuelo como a otros compañeros”, comenta Vercet, quien explica que actualmente el vuelo lo tiene previsto para principios de mayo, aunque no sabe con seguridad si esto será posible. “Si para entonces no podemos volver miraremos otras posibles soluciones, de hecho estamos en lista de espera en la embajada española en Roma para que nos tengan en cuenta de cara a una futura repatriación en el caso de que fuera necesario ya sea en barco o en avión”, concluye.

EL PELIGRO QUE NO SE VEÍA

Vercet recuerda que las medidas tomadas por el gobierno italiano por el nuevo coronavirus fueron progresivas. “En un principio las medidas eran que era recomendable no salir de casa, lavarse las manos con frecuencia y respetar las medidas de seguridad. El peligro obviamente no se percibía y la gente seguía haciendo vida normal. La gente iba a las cafeterías, salía de fiesta y no se privaba de absolutamente nada, yo incluida”, reconoce y añade que cuando se empezaron a escuchar los primeros casos ella se encontraba en Roma realizando una formación. “La gente en la estación de tren de Roma iba con mascarilla y nosotros nos reíamos de la exageración. Aproximadamente dos semanas después, empezaron los primeros casos en la región de la Lombardía. Pero como todo el mundo decía que era igual o menor que una gripe normal en ningún momento nos alarmamos”.

Tanto la situación como la percepción de alarma se fue agravando. “Cuando yo personalmente me empecé a alarmar fue cuando leí la noticia de que Italia era el país de Europa con mas infectados por coronavirus, después de China y Corea. Un día después decretaron Italia zona roja y cerraron fronteras decretándose el lunes la cuarentena obligatoria”. Arancha Vercet se encontraba en ese momento en un pueblo cercano a donde reside. “Mi tutor académico me envió un mensaje diciéndome volviera inmediatamente a mi pueblo ya que si la policía me veía podría multarme o detenerme. Allí empecé a creerme que la cosa era enserio. Luego me dijeron que el sistema sanitario se estaba empezando a colapsar y que debíamos evitar no contagiar a nadie

FOTO. La alcoyana Arancha Vercet posa en la Fontana de Trevi

Información más completa en la edición de El Nostre Ciutat del 9 de abril

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