La familia de Marta Pérez sigue luchando por la vida de la joven
Actualmente está en un hospital de Valencia, tras sufrir un choque anafiláctico en septiembre
A principios de marzo los familiares de Marta Pérez, una joven residente en Ibi que entró en coma el pasado mes de septiembre tras sufrir un choque anafiláctico, empezaron una campaña de difusión del caso de la joven de 19 años a través de redes sociales, con el objetivo de conseguir que concedan una prórroga para que Marta continúe ingresada en un hospital de Valencia para que le sigan suministrando un tratamiento al que “está respondiendo” y gracias al que “está evolucionando”, según apunta la madre de Marta, María Verdejo.
Tal y como se ha indicado, fue en septiembre cuando Marta tuvo una fuerte reacción alérgica a los frutos secos tras tomar un batido en un gimnasio: “ella preguntó qué llevaba y al decirle que no llevaba nada, se lo tomó”, relata Verdejo.
Según la información aportada por la madre de Marta, la joven enseguida empezó a encontrarse mal y acudió al centro de salud de la localidad, donde le administraron Urbason y la enviaron a casa.
Marta continuaba sintiéndose mal, por lo que volvieron de nuevo al centro sanitario, y en apenas unos minutos “empezó a no poder respirar”.
Finalmente, la joven fue trasladada al hospital Virgen de los Lirios de Alcoy –el de referencia que hay en el departamento de salud al que pertenece Ibi–, ya en coma y sedada.
“Desde el primer día no apostaron nada por la vida de Marta, nos dijeron que no viviría y que nos hiciéramos a la idea”, denuncia Verdejo sobre el Hospital de Alcoy, quien comenta que, a partir de ese momento empezó una lucha por la vida de su hija, que se ha basado en peticiones de traslado, en presentación de reclamaciones por parte de los familiares, etc.
Sobre dicho hospital y los profesionales, Verdejo recrimina que ha habido “comentarios muy despectivos y mucha falta de atención y profesionalidad”.
En diciembre Marta ingresó en un centro de neurorrehabilitación de Valencia finalmente. Su madre cuenta que la joven “empieza a hacer pequeñas conexiones” y ya responde a ciertos estímulos. Además, le han hecho una prueba “que ya pedí en Alcoy y nos dijeron que no sentía. En Valencia nos han dicho que se entera y lo entiende todo”.
Tras una primera prórroga, la familia está tratando que el Hospital de Alcoy conceda una segunda, puesto que el plazo de estancia en Valencia concluye el 19 de abril, y es el citado hospital el que debe autorizarla. “Nos sentimos desamparados, nos están poniendo trabas para todo”.
Los familiares también han iniciado una campaña de recaudación de fondos para hacer frente a todos los gastos que genera una situación así, además de los cuidados de Marta, con férulas y otros tratamientos, y también una campaña de recogida de firmas.
El Nostre ha contactado con la conselleria de Sanidad, encargada del caso, y no ha proporcionado información.