La cara más guerrera y nazarí de Kiko Cano

El alférez moro, Kiko Cano, de la filà Abencerrajes, ha puesto el punto y final a la entrada de las fiestas de Moros y Cristianos.

El hilo argumental de este cargo, muy guerrero y nazarí, hace alusión al retorno a la montaña desde Granada en representación del auxilio y la defensa del Islam que realizarían los Abencerrajes ante la solicitud de ‘la Muntanya’.

Cano ha hecho referencia a su filà a través de los diseños de Santi Carbonell y de Víctor Ferrer, que se han encargado de toda la alferecía –a excepción de la escuadra de negros–.

Abril, la hija menor del alférez ha sido la favorita, mientras que la mujer, Mar Francés, ha sido una de las damas y la hija mayor, María, ha aparecido representando a la princesa Amira.

Kiko Cano ha representado a Yusuf ibn al-Sarray (La espada en la mano de Alá), y ha estado acompañado de 29 muyahidines nazaríes y sus 24 damas, además de multitud de familiares y amigos en su Guardia.

La parte musical ha sido determinante en el cargo, especialmente en el boato, y Cano ha confiado en Saül Gómez i Soler, puesto que todas las marchas que han sonado han sido de él, incluidas dos nuevas ‘Banu Sarray’ (Abencerraje en árabe) y la marcha mora ‘Qal’at Aryuna’ (Taifa de Arjona –segundo apellido del alférez moro–). La segunda de ellas ha acompañado a la carroza de los caballeros y del propio alférez, interpretada por A.M. Santa Cecilia de Castalla.

El ballet de Carmina Nadal con ‘Danza de los Sueños’ y con ‘Guardianas de la Noche’ ha sido el encargado de la parte del baile en el cargo festero.

La escuadra especial ha cerrado esta alferecía mora, que ha corrido a cargo de El Trencat, tanto en diseño como en confección.