Juli, orgulloso de lucir el brazalete de capitán
"Es una satisfacción enorme y a la vez una responsabilidad. Espero estar a la altura"
Ser capitán en el Deportivo no es cosa menor. Es ingresar en un selecto grupo de futbolistas que guarda en sus altares a nombres tan queridos para el aficionado como Castillo, Gandía, Víctor, Carrión, Maestro o Navarro, por citar los más recientes. La política deportiva de los últimos tiempos, donde el producto propio escaseaba en la plantilla blanquiazul, hizo que sumasen muchos años sin un capitán alcoyano. Habría que remontarse a hace 16 años, con la retirada de Víctor en la temporada 2003/04, aquella del recordado ascenso en el estadio Pitín de Mar Menor, para encontrar al último canterano nacido en nuestra ciudad que lució el brazalete. Una larga ausencia que ahora se ha visto cortada con el nombramiento de Juli como primer capitán del equipo, por delante de Jony Ñíguez y Rubén Garcés.
–¿Imagino que muy satisfecho?
–Contentísimo, para mí es todo un orgullo poder lucir el brazalete de capitán del equipo de mi ciudad. Es una satisfacción enorme y a la vez una responsabilidad. Espero estar a la altura. Es la primera vez en mi carrera que soy capitán, había lucido el brazalete de forma ocasional. Además, para mí es doblemente un orgullo al ser los propios compañeros quienes me han elegido. Se hizo una votación secreta, en la que cada jugador puso el nombre de tres compañeros. Para mí representa mucho porque es entrar en una lista de jugadores que han significado mucho para el Alcoyano. Verme en ella es todo un honor. Además, Toni Castillo me entregó el brazalete bordado con mi nombre y para mí es como un tesoro. Agradezco mucho el gesto de alguien tan querido. Tengo muchas ganas de lucirlo en el verde.
–¿Para cuándo tu vuelta a los terrenos de juego?
–Seguramente la semana que viene me reincorpore al grupo y empiece a trabajar progresivamente. Llevo seis semanas desde el primer partido de pretemporada que me lesioné en Muro. Lo normal en estos casos son de cuatro a cinco semanas pero fue una recaída de una lesión muscular de la pasada temporada, con lo que la reaparición se retrasa a ocho semanas. Lo importante ahora es que cicatrice bien y pueda volver con todas las garantías. Para ello vengo trabajando a diario, no he parado. El fútbol moderno no es solo entrenar y jugar. Hay una metodología detrás en la que se da mucha importancia a los pequeños detalles. En el Alcoyano afortunadamente trata de cuidar cada vez más estos aspectos, incorporando a su organigrama un nutricionista y un readaptador.
–¿Algún secreto habrá para seguir en activo con 39 años?
–Solo trabajo, trabajo y más trabajo. Trato de cuidarme no solo físicamente, también en aspectos como la alimentación y el descanso. En estos veinte años que llevo dedicados al fútbol ha avanzado mucho todo lo que concierne a la preparación. Afortunadamente tampoco he tenido ninguna lesión grave. Pese a mi edad, estoy con la motivación de un chaval y físicamente me veo como mis compañeros.
–¿Te ves con más de 40 años jugando al fútbol?
–Esa es mi intención. No sé hasta cuándo, pero ahora mismo me veo jugando alguna temporada más a este nivel. Mentalmente me encuentro de maravilla y físicamente creo que aún tengo fuelle para seguir en activo. Disfruto con mi trabajo como hacetiempo que no lo hacía. Llevo tres o cuatro temporadas en las que me siento incluso mejor que cuando estaba empezando. Entonces eras joven, haces locuras, cosa que ahora no pasa porque le das un valor enorme al día a día. Para mí es un privilegio ir a entrenar. Me siento la persona más feliz del mundo. Ello me da vitalidad para continuar. Intento no hacer planes de futuro, sino disfrutar de lo que tengo. Cuando llegue el momento ya tomaré una decisión. Ahora mismo no puedo decir si seré o no entrenador. Tengo los tres niveles, por lo que podría sentarme en el banquillo de cualquier equipo, igual que me he formado en cursos de director deportivo y también en nuevas tecnologías aplicadas al mundo del fútbol. No descarto nada, lo que sí que me gustaría es seguir vinculado con el verde.
–Hablemos de esta temporada, del regreso a la Segunda B
–Está claro que somos un recién ascendido pero el Alcoyano es un club que lleva en la categoría muchos años, no somos unos desconocidos. Habrá que cambiar el chip, para ello han venido muchos fichajes. Son jugadores que conocen muy bien la categoría. Estamos en un proceso de conocernos, eso requiere un tiempo. La pretemporada ha sido muy buena, las circunstancias nos han permitido enfrentarnos a equipos de muchos nivel como el UCAM, Yeclano o Murcia. En todos, el equipo ha competido y ha dado la talla. También se vio en Orihuela que el equipo tiene personalidad. Se ha comenzado por los cimientos, asentar la defensa y poco a poco iremos creciendo en ataque, que es lo que aún nos falta. Personalmente pienso que tenemos mucho margen de mejora aún.
–Si tuviéramos que hablar de un objetivo, ¿cuál crees que sería el de esta temporada?
–No me gusta hablar a largo plazo, creo que no merece la pena y más en una temporada tan atípica como la actual. Si tuviera que decir algo, diría que no renunciamos a nada. Ahora bien, esta temporada hay un objetivo muy goloso como es la 2B Pro. Creo que para un equipo como el nuestro, que debe ser humilde y trabajador, lo importante es el día a día y centrarse en hacer bien las cosas para mejorar. Por naturaleza, somos un equipo que saldrá a cada partido a por los tres puntos. En Orihuela ya se vio.