Jaque al planeta
El dicho de que ‘La realidad supera a la ficción’ cobra su pleno sentido estos días. Por una parte, tenemos una estampa parecida al apocalipsis con lo sucedido en muchos supermercados; y por otra, la de estar conectados entre nosotros justo cuando no podemos tocarnos. La incertidumbre nos une. Una situación inaudita que nos ha hecho bajar a la tierra, y que espero, que después de todo sirva para algo y que el aprendizaje perdure en el tiempo, aunque el mismo ser humano que sale a los balcones a aplaudir a aquellos que están en primera línea del frente o que da ánimos con pancartas en los balcones, es el que traspasaba el domingo el cordón policial en la entrada de la vía verde (así lo comprobé cuando salí a trabajar) por un lateral y lo dejaba atrás como si nada. Es cierto que son muchísimas más las personas las que hemos decidido quedarnos en casa haciendo caso a una medida que busca el bien común. De hecho, estas mismas líneas las escribo desde mi casa, porque así lo he podido hacer, hay otros muchos que no tienen esas posibilidad, y es precisamente el trabajo de esas personas el que ahora se pone en valor cuando hace tan solo una semana se menospreciaba. Es a este, y a otros aspectos, a lo que me refiero que debemos aprender cuando por fin, nosotros le hagamos jaque mate al virus que ha puesto en jaque al planeta.
En estos días de corazón frío es cuando también debemos de tener la mente fría, tratar de vivir esta situación anormal con la mayor calma posible y reflexionando sobre los pequeños gestos que son grandes en tiempos de coronavirus, como por ejemplo, no tener miedo de darle un abrazo a tus padres, a tus familiares, a tu pareja o amigos.
Estamos impregnados de preocupación, de incertidumbre, es inevitable, y en medio de estos sentimientos aparece la conciencia social, aquella que suele brillar por su ausencia y que todavía debe brillar más y perdurar sin ser una estrella fugaz.
Debemos ser empáticos, tener más respeto que nunca porque aquellos que están en el batallón están demostrando que la unión es imprescindible para superar los momentos difíciles. Aprendamos de nuestros errores y valoremos lo que tenemos.
Estamos viviendo algo histórico, en todos los sentidos, algo que como persona y como periodista, dudo que olvide. No dejemos atrás esto en un tiempo, no olvidemos lo que realmente es importante y que, por desgracia, solo lo contemplamos en momentos complicados.
Como muchos, o como la mayoría de personas, tenemos a seres queridos que están expuestos a esta crisis sanitaria porque están al servicio de los demás, seamos conscientes, valoremos y aplaudamos, ahora y siempre su labor, pongamos por delante de todo la salud y el trabajo de aquellos que velan por ella.
Ahora mismo somos los peones de una partida de ajedrez, pero juntos, podremos coronar el tablero y hacerle jaque mate al COVID-19.