Inèrcia presenta en concierto ‘Magnetismes’
El lanzamiento del último disco de los banyerenses coincidió con el estado de alarma
Inèrcia ha presentado su último disco, ‘Magnetismes’, en un concierto ofrecido en el parque Villa Rosario de Banyeres. Bajo un formato totalmente distinto al habitual, la banda banyerense ofreció un repertorio en modo acústico, lejos de lo que tiene acostumbrado al público, lo que pone de manifiesto su capacidad de adaptación a la nueva situación que impone la Covid-19 para este tipo de espectáculos.
Actuar en su pueblo les permitió contar con colaboraciones como la de Bea Rico (chelo), o la de Francis Blanes (teclado). También participaron varios músicos de la Nova entre los que estuvieron Noelia, Bea, Carlos y Adrián, apoyados por Jordi Pérez, que hizo las adaptaciones musicales. De igual forma hubo una representación de la Coral Mariola, que interpretó varias canciones tras los arreglos de Miquel Payá.
Aitor, cantante del grupo, refería que el lanzamiento de ‘Magnetismes’ coincidió con el confinamiento y la “locura” del estado de alarma. “Nos dio de lleno”, afirmó, “porque coincidió en el momento en que íbamos a iniciar la presentación del disco y hacer la promoción. Tuvimos que cancelar todos los conciertos previstos y hubo que recurrir a la fórmula online para poder promocionar el trabajo por Internet y las redes sociales. Hubo que adaptarse a la nueva realidad”.
‘Magnetismes’ es el resultado de una evolución natural. “Está claro que poco a poco vamos cambiando. Aunque mantenemos nuestra esencia, el disco recoge nuevos matices. Influye mucho lo que hayamos escuchado, porque al final acabamos recogiendo detalles de otros grupos. Ello hace que abramos la puerta a nuevos estilos y que al final todo acabe plasmado en nuestro trabajo”. Las letras de ‘Magnetismes’ pretenden reivindicar la necesidad de construir una sociedad menos individualizada y apostar por la relación y la proximidad. “Es curioso, es un mensaje que nos llega en un tiempo de confinamiento, en el que ni podíamos relacionarnos, ni reunirnos, ni salir a la calle. Ironías de la vida”.