“Hay que conseguir que la gente venga al teatro de forma habitual”
El director del Calderón desde el pasado mes de septiembre, Ricard Sanz, habla sobre los objetivos que se plantea en el cargo
El Teatre Calderón es el principal referente artístico de Alcoy. Desde el pasado mes de septiembre, Ricard Sanz es el director de este establecimiento, cuya mantenimiento, personal y limpieza gestiona una empresa privada –es una concesión de dos años, prorrogable a dos más–, que ha sido la que ha escogido a Sanz para el cargo.
Ricard Sanz cuenta con una dilatada trayectoria en la gestión de instalaciones e implantación de protocolos, además de conocer de cerca el mundo del teatro puesto que es actor y también ha dirigido algunas obras, después de empezar como ayudante de dirección y regidor de sainetes en Alcoy. Como actor señala que “trabajo el papel hasta que consigo sentir en el escenario lo que mi personaje sentiría”.
Esa experiencia también la quiere aplicar a esta nueva etapa en cuanto a conocer las “necesidades que tienen las compañías y los artistas”.
– ¿Cómo recibió el cargo? ¿De qué forma lo asume?
– Esta oferta me vino de repente, sin esperarlo, ni buscarlo. Cuando me llegó estaba en un momento profesional complicado. En mi anterior trabajo ya llevaba muchos años, había cambios y no estaba por la labor de continuar.
Cuando me vino la oferta, fue un regalo. Poder llevar una instalación en la que se representan obras de teatro es cuidar la casa del actor, y es un reto muy grande que afronto con ilusión y unas ganas tremendas.
Mi intención es que venir al teatro sea una experiencia, a nivel de público, de actores, de trabajadores….Hay que volver a hacer que la gente venga al teatro de forma habitual.
La primera labor que me planteo es, de cara al espectador, qué me gustaría encontrarme, y por eso estamos ya tematizando algunos espectáculos, y que desde el principio haya una ambientación de lo que vas a ver.
– ¿Qué otros objetivos se plantea?
– La configuración de este teatro, con el pasillo tan largo, representa una complicación. Está como muy cerrado y mi intención es abrirlo al público, y no solo cuando haya una representación. Quiero que sea un punto de encuentro, de atracción.
Esto es un teatro municipal y la gente tiene que conocerlo y disfrutarlo no solo cuando haya representaciones, si no que hay que encontrar la forma de que otras manifestaciones culturales tengan cabida.
– ¿Se ha marcado un tiempo para llevar a cabo esas acciones a de las que habla?
– Me pongo como meta que durante este 2025, todos los proyectos que están sobre el papel, estén en marcha.
Con independencia de mi estancia aquí como director, que eso depende de decisiones empresariales, lo que me preocupa es que, mientras que yo esté aquí, ir haciendo los cimientos para que, aunque yo no esté y vengan otras personas a dirigir, mantengan esa labor de llevar al Calderón al sitio donde se merece.
No me importan tanto los objetivos, si no los fundamentos para conseguir esos propósitos.
– Hasta el momento, ¿qué balance hace de estos tres meses en el cargo?
– Cuando yo llego me encuentro con carencias importantes en el teatro, muchas derivadas de gestiones anteriores, y otras derivadas de la propia gestión administrativa.
En estos tres meses, y desde que Salzillo arranca con la concesión el pasado mes de abril y se hacen informes técnicos sobre el estado del teatro, el ayuntamiento se pone en marcha y está haciendo una serie de actuaciones como la adecuación a normativas, sobre todo relacionadas con cuestiones de seguridad. Después, y para mí es importantísimo, está el compromiso de que haya una partida este año para continuar con esas adecuaciones y llegar a un punto en el que hablemos de mejoras, que esa es mi labor, que estén cubiertas todas las necesidades, tema de normativas, iluminación, maquinaria escénica…
– ¿En qué punto quiere situar al Teatre Calderón?
– Dentro del ámbito teatral, o el sistema de red de teatros, el Calderón no estaba a la altura que se merece.
En los últimos tiempos la tendencia está cambiando y también las opiniones.
Mi intención es colocarlo en el circuito nacional y que haya compañías que cuando se les plantee venir aquí, digan que sí enseguida.
Puede leer la entrevista completa en El Nostre del viernes 10 de enero.