“Había llegado el momento”
Un anuncio sacudía las redes sociales el jueves por la tarde. Mario Fuentes comunicaba por sorpresa a través de su cuenta de twitter que cuelga las botas. El central madrileño, de 31 años y capitán blanquiazul, aseguraba en su despedida que “se trata de una decisión dura pero muy meditada y convencido de que es el momento oportuno”.
En su repaso a lo que habían sido doce años como profesional, explicaba que “me voy con la sensación del trabajo bien hecho, de haber defendido cada una de las camisetas que he vestido con el máximo respeto y orgullo a los colores y los sentimientos de sus aficionados”.
Mario Fuentes tuvo muy presente en todo momento al Alcoyano, que junto al Leganés y Lleida han sido “mis tres clubes y doy mil gracias. Algún día podré contar que estuve en tres equipos históricos. Me llevo tantas buenas cosas que ninguna mala puede emborronar una carrera profesional preciosa que siempre recordaré”.
Casi de manera paralela a su adiós, se filtraba la opción de seguir vinculado al Alcoyano como ayudante de Vicente Mir. “Es una posibilidad que está ahí, pero no es la única. Tengo otra opción para empezar esta nueva etapa en el extranjero y no quiero precipitarme. Aún está muy reciente la decisión de dejar el fútbol. Me gustaría hablarlo con mi familia. Está claro que seguir en el Alcoyano me atrae mucho, han sido cuatro años maravillosos y valoro mucho continuar aquí”.
El madrileño, que tenía una buena oferta del grupo III para seguir en activo y que también sobrepesó la posibilidad de volver a su tierra y jugar en algún equipo de la categoría para cerrar su etapa como futbolista, ha confesado que la presión vivida el último curso ha jugado un papel importante en su anuncio de dejar el fútbol. “No ha sido una decisión repentina, llevaba tiempo en mi cabeza. La última temporada ha sido de mucho desgaste. La ilusión después de un año con tanta tensión no es la misma y no quería vivir otra temporada igual. Mi cabeza no estaba al ciento por ciento y pensaba que había llegado el momento de decir adiós”.
Las muestras de cariño no cesaron en las horas posteriores a su comunicado, bien a través de llamadas o de mensajes escritos. “Me llena de orgullo la respuesta que he tenido de la gente. Es una sensación rara pero viendo las muestras de cariño que he recibido me llenan de orgullo y me hace pensar que algo bueno habré hecho. Al final, te quedas con las amistades que has ido haciendo y las personas que conoces. Los cuatro años del Alcoyano han sido los más especiales de mi carrera. Me queda la espina de no haber ascendido en los cinco play-offs que he disputado pero espero poder quitármela en esta nueva etapa que abro ahora”.