Gracias, Mercadona y AITEX

Asistimos a un momento de la historia local en el que las mayores inversiones que se están realizando, con perspectivas de repercusión social y económica, están corriendo a cargo de la iniciativa privada. Ya no son la consellería tal, la concejalía cual ni el ministerio mengual. Ahora las mayores inversiones en Alcoy corren a cargo de Mercadona y de AITEX. Y me parece muy bien por su parte pero vergonzoso por la parte de los otros. Mercadona, la supermarca valenciana de Juan Roig, está construyendo un nuevo centro en la salida sur de la ciudad que combina el servicio de gran supermercado con el de centro logístico y, además, parece ser que su ubicación propiciará espacio para otras actividades como podría ser un rinconcito para que McDonalds, ya de una, legalice su ubicación y abandone el polémico terreno sobre el que se asienta.
Las obras de Mercadona, frente a la gasolinera Bou, se están realizando con la agilidad de la iniciativa privada, lejos de la somnolencia pública, y no deja de sorprender la falta de agilidad del gobierno municipal para contagiarnos optimismo con esta inversión. Nadie dice nada de lo que allí está ocurriendo, como si nos fuera ajeno, aunque por la pinta que tiene se inaugurará antes de que cambie la luna. Poco a poco, la plantilla de personal directo de Mercadona en Alcoy debe estar ya cerca del pódium.
La otra gran inversión, la de los empresarios textiles de AITEX, ofrece un espectáculo de ingeniería a los pies del Castellar y seguro que revolucionará el barrio de Batoy. La enorme cantidad de tierra que se extrae está creando, en la calle Rafael Laliga, de la Zona Nord, una nueva explanada que sirve, además, para sujetar la ladera de la Rambla. Pero tampoco nadie explica ni dice nada. Y eso que el gobierno local tiene el gabinete de comunicación más numeroso de la historia municipal alcoyana. Pero no será por la cantidad de cosas nuevas que tienen que contarnos.

LA VICTORIA DE PAU BERNABEU
Ya sé que la condición de ser alcoyano no es garantía de nada, ni siquiera de una buena arrancà de diana, pero Juan Ignacio Torregrosa comprenderá que entre un señor de Elda y un alcoyano, a igualdad de condiciones como buen gestor, se prefiera al de casa. Y Pau Bernabeu, ganador de las elecciones a director del Campus de Alcoy de la Politécnica, se perfila como un buen gestor. Solo con su propósito de no competir con el Campus de la Universidad de Alicante y encontrar sinergias conjuntas, ya se merece el cargo, aunque tal como tenemos la demografía no resulte fácil creérselo.
Lo que no sabemos es cómo llevará la empatía con el gobierno municipal del PSOE. No olvidemos que Pau Bernabeu y su esposa fueron concejales socialistas tiempo atrás y echaron a correr en cuanto pudieron.
Quien no ha tomado las de Villadiego ha sido el alcalde de Alcoleja, Quico Fenollar. Ya no debe quedarle mucho tiempo de vivir en el purgatorio político al que la dirección de los socialistas le enviaron por año y medio, sancionado sin militancia, como castigo por haberse enfrentado a Toni Francés para aspirar a ser diputado provincial. Fenollar provocó una votación de todos los concejales socialistas del partido judicial de Alcoy y perdió. Pero no fue suficiente y le sancionaron, no por ejercer la democracia y la participación, sino por saltarse a la torera los estatutos y la disciplina de partido. Pecador. En unas semanas acabará la sanción y regresará a la Casa del Señor y Alcoleja volverá a tener un alcalde, oficial, del PSOE.