Gaizka Porras, una promesa que es ya una realidad
Entre los deportistas de la nueva generación que vienen empujando con fuerza se encuentra Gaizka Porras. El judoka, de 18 años, cumple su segundo curso como becado en el Centro de Alto Rendimiento que la Federación Española de Judo tiene en Valencia. Allí hace un seguimiento directo de las futuras promesas de este deporte que es uno de los grandes atractivos del programa olímpico y que están llamados a formar parte de la élite nacional cuando lleguen a la categoría sénior.
Él es uno de los que forma parte de ese selecto grupo. Tras destaparse en el Judo Club Alcoi, que descubrió su gran potencial y luego lo mimó hasta hacerlo subcampeón de España en su despedida en la categoría cadete, fue quemando etapas hasta que la Federación Española de Judo le reclutó hace dos veranos para incorporarlo a su programa de talentos.
Ello implicaba tomar la decisión más difícil que era abandonar su casa, apartarse de su familia y amigos, para trasladarse a Valencia, algo que no ha llevado todo lo bien que esperaba y le ha causado algún problema a nivel emocional. “Es lo que peor llevo, haber tenido que apartarme de la familia. Aún me cuesta cada vez que me tengo que volver tras haber estado en casa. Las semanas que tengo competición y no vengo se me hacen muy largas. Afortunadamente cuando estoy entrenando o compitiendo me olvido de todo y me centro en lo que estoy haciendo. También he tenido lesiones importantes, tuve que pasar por el quirófano y en un accidente me corté el gemelo. Fueron momentos duros pero ahora ya estoy bien y lo tengo olvidado”.
Esas fases de bajón los compensa con un elevado instinto competitivo cada vez que pisa un tatami. El año pasado fue una temporada de adaptación no solo a su nueva vida sino al salto de categoría por edad y estrenarse como júnior. Consiguió clasificarse para el Campeonato de España pero en el primer combate de la categoría de -60 kg le tocó enfrentarse a quien luego se proclamó campeón de España y fue eliminado a las primeras de cambio.
El camino para resarcirse de esa pequeña desilusión comenzó la pasada semana en el autonómico, en el que fue tercero, logrando así el billete para la fase sector que se celebra la próxima semana en el polideportivo de Benicalap (Valencia). Los dos primeros tendrán la clasificación asegurada para el Campeonato de España.
EL NACIONAL, LA LLAVE
El Nacional es la competición clave para Gaizka Porras esta temporada. Si consigue subir al podio será la llave para que la Federación Española le incluya en alguna convocatoria para disputar competiciones de la Copa de Europa, que es la antesala de los Europeos. “Estoy muy ilusionado y me veo preparado para conseguir medalla en el Nacional. Tuve unas semanas de bajón por unos problemas a nivel familiar pero ya estoy mejor y la preparación ha sido buena”, confiesa.
En el Centro de Alto Rendimiento de Valencia tiene la oportunidad de entrenar a diario con los mejores judokas de su edad. No solo de España, también de otros países. Las selecciones de la República Dominicana y de Venezuela se encuentran en Valencia y hace poco también estaba la italiana. “Mi nivel de judo ha subido lógicamente, he mejorado mucho, se nota el entrenar a diario con gente que compite a nivel internacional. Creo que estoy siguiendo los pasos adecuados. El año pasado fue de adaptación, en este confío en hacer un buen Nacional y salir más a nivel internacional, y de cara al próximo espero seguir con esa evolución en mi último año como júnior”.
Su día a día actual comienza como estudiante en prácticas de segundo grado de Enfermería. A mitad de mañana lo deja para hacer un par de horas de preparación física antes de comer en el Colegio Mayor. Después vuelta a casa para descansar y coger fuerzas para afrontar lo más duro del día, que son las dos horas en el tatami, entre las 19,30 y las 21,30, siendo raro la jornada que no regresa a casa antes de las diez y media de la noche. “Es duro pero como estoy haciendo lo que me gusta, se sobrelleva de la mejor manera posible. En el futuro me gustaría dedicarme al judo y ser profesional. Mi ilusión es conseguirlo y me preparo para ello”.
Foto: Gaizka Porras con el judogi de la Selección Española