Fumata blanca para la renovación de Vicente Parras

En un fútbol cada vez más mercantilizado, donde es difícil ver echar raíces, resulta extraño cuanto menos encontrar idílios como el que mantiene Vicente Parras con el Deportivo. Camino ya de completar su quinta campaña, el técnico ilicitano apunta a una sexta e incluso una octava temporada en el banquillo blanquiazul.

Su nombre es el único que el club maneja ahora mismo para liderar el segundo proyecto de Juan Carlos Ramírez como propietario único del Alcoyano. Ambas partes ya se han sentado formalmente a hablar y las conversaciones mantenidas han ido más allá de una simple toma de contacto para pulsar la predisposición a seguir en el cargo.

Salvo un giro inesperado de última hora en las negociaciones, se podría decir que la continuidad de Vicente Parras como técnico está prácticamente asegurada a falta de una firme que rubrique los contactos mantenidos en las últimas semanas.

En ese nuevo contrato faltaría definir su duración, si el compromiso solo es por una temporada o por el contrario el acuerdo es bianual, como fue su última renovación en la que el técnico firmó por dos años.
En esas conversaciones para que Parras siga en el Alcoyano también se habló de definir la plantilla del próximo ejercicio. En teoría sería el último de Juan Carlos Ramírez en el Alcoyano, tal y como anunció cuando llegó al club en octubre de 2022, comprometiéndose para lo que quedaba de ese curso y los dos siguientes.

Su intención entonces era echar el resto este verano y con la base de equipo consolidada en este año y medio tratar de reforzar la plantilla con varios fichajes importantes con la intención de asaltar una de las plazas de ascenso. Ese trabajo ya se ha comenzado y sobre la mesa hay una serie de nombres como posibles refuerzos. Se quiere evitar lo ocurrido el pasado verano en el que hasta la semana previa al inicio liguero se estaba cerrando la plantilla