Francés y Oltra abordan con Domus Vi la gestión pública del geriátrico
Conselleria anuncia nuevas inspecciones para analizar porqué este centro ha tenido una cifra de fallecimientos que se sale de la media en la Comunitat
La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, y el alcalde de Alcoi, Toni Francés, se han reunido durante una hora este lunes con la consejera delegada de Domus Vi en España, Josefina Fernández, para tratar el interés de la Generalitat y del Ayuntamiento de Alcoy en la vuelta a la gestión pública de la residencia que esta empresa regenta en las instalaciones del antiguo hospital civil de Oliver.
Aunque el encuentro ha acabado sin ningún tipo de acuerdo entre las partes, según han informado fuentes conocedoras, desde las dos administraciones se ha expuesto que la residencia sufrió un proceso de privatización en 2002 con un contrato a 45 años sin ningún tipo de contraprestación para las arcas públicas, más allá de la realización de una serie de reformas en el centro. Fue el entonces conseller del PP Rafael Blasco el que privatizó un recurso que se quedó Novaire, una de las empresas agraciadas con el conocido sistema de accesibilidad que posteriormente fue derogado por los tribunales.
Posteriormente, la empresa Domus Vi se hizo cargo de la residencia alcoyana, que durante esta pandemia ha sido la que más fallecimientos ha registrado en la Comunitat Valenciana y en la que se han contagiado la práctica totalidad de sus residentes. Indicar que además de este caso, Domus Vi gestiona once centros más en la Comunitat y en nueve de ellos han sufrido casos de contagios entre residentes y empleados.
En este sentido, desde la Conselleria de Igualdad se ha anunciado que van a realizar nuevas inspecciones para analizar los motivos por los que esta residencia ha tenido una cifra de fallecimientos que se sale de la media en la Comunitat Valenciana. Por su parte, el Ayuntamiento de Alcoy le ha trasladado a Domus Vi las quejas de los familiares de residentes, quienes han lamentado «la falta de comunicación y empatía de los responsables del centro durante el estado de alarma y en un momento de gran preocupación para ellos», han señalado.
De esta manera, tras esta primera toma de contacto entre las partes se han emplazado a una posible reunión más adelante, en función de las posibilidades que se encuentren de llegar a un acuerdo.