Exigen que se cumplan los plazos de las obras de Entenza

Las obras de reurbanización de la calle Entenza ya han empezado. Concretamente lo hicieron el pasado martes, 3 de abril, y han traído consigo las molestias lógicas de cualquier actuación de esta envergadura, afectando sobre todo al tráfico rodado en una de las zonas de mayor densidad circulatoria de la ciudad.

El proyecto para convertir esta transitada vía en una calle más orientada al peatón se ha iniciado por la fase –se han establecido cuatro períodos– que abarca el tramo de Entenza entre Espronceda e Isabel La Católica. Por este motivo, el tráfico ha sido modificado en ambas calles, de forma que han pasado a ser de doble sentido, desviando la circulación que procede de Entenza por la calle Pintor Cabrera. Precisamente, este está siendo el punto más conflictivo en los primeros días y especialmente a hora punta se origina cierto caos circulatorio en este cruce, que ahora recibe el tránsito de Entenza, la propia calle Pintor Cabrera y los vehículos que descienden de la vía y la zona de Horta Major.

No obstante, desde la Asociación de Vecinos Ensanche-Benisaidó valoran positivamente el funcionamiento de los cambios en el tráfico en estas primeras jornadas, asegurando que estos están actuando de forma disuasoria para los conductores. “Pensando que el tráfico va a ser complicado, muchos vehículos optan por vías alternativas, además de que el tráfico pesado, camiones de más de diez toneladas, no puede acceder”, recuerda Emili Castelló, de la junta de la Asociación de Vecinos.

Por su parte, la presidenta de los comerciantes del barrio, María José Francés, exige que se cumplan los plazos fijados por la empresa concesionaria de las obras, de cara a minimizar los problemas derivados de las mismas, sobre todo a nivel de tráfico. Recordar que para el tramo de obras en marcha, está previsto que duren un máximo de cinco meses, si bien podrían estar a punto incluso antes –en verano–, según informó el Ayuntamiento en una reunión reciente con vecinos y comerciantes.
Francés afirma que lo deseable sería que la actuación estuviera completada “a tiempo para no interferir en la campaña navideña 2018-2019”, aunque sabe que esto es difícil. “Somos conscientes de que en las obras surgen imprevistos y tenemos el compromiso del Ayuntamiento de acelerarlas al máximo, esperemos que así sea”, destaca.

Recogiendo un poco el sentir de los comercios asociados, María José Francés reconoce que “sabemos que esto puede afectar a las ventas, pero tenemos que ser pacientes y pensar que el proyecto busca beneficiarnos, porque la calle dejará de ser una autopista y los vecinos y compradores podrán pasear tranquilamente, eso al final nos ayuda a los negocios”. Y respecto a la falta de aparcamiento, otro de los aspectos más criticados del proyecto por parte de vecinos y comerciantes, unos y otros aplauden la medida de habilitar un solar en la calle Cid 22 para poder estacionar, con el fin de cubrir las plazas que quedan inutilizadas durante las obras. Piden, además, que este servicio se prolongue, a ser posible, más allá de la duración de las obras.

Mientras, Carlos Aracil, presidente del Mercat de Sant Roc, instalación que en esta primera fase de las obras está resultando directamente afectada, comenta que las molestias por las obras son “razonables”, si bien asume que los días de mercadillo –miércoles y sábado– son más problemáticos. En cuanto a la eliminación de plazas de aparcamiento, Aracil recuerda que el mercado dispone de un convenio con el parking de la Uxola, para facilitar el aparcamiento a los clientes.

Solicitud de paciencia

El jefe de la Policía Local de Alcoy, David Lerma, ha pedido paciencia a vecinos y conductores en general, a raíz de los cambios de tráfico ocurridos a consecuencia del inicio de las obras de mejora de la calle Entenza. Lerma valora positivamente las medidas adoptadas para el desvío de la circulación, si bien apunta que tienen previsto introducir mejoras la próxima semana “ajustando” los semáforos de la zona de Horta Major, que es donde se están produciendo mayores problemas. También reconoce que la próxima semana, cuando los escolares retomen las clases, se pueden originar nuevas complicaciones en la circulación de vehículos.

Cuatro fases

Las obras de reurbanización de la calle Entenza se han planificado en diferentes fases con el fin de minimizar el impacto sobre el tráfico y sobre los peatones. La primera fase empezó el pasado martes, se desarrolla entre Espronceda e Isabel La Católica, y entre los primeros trabajos que se están llevando a cabo está la revisión del estado del colector de pluviales que discurre por Isabel La Católica y que conecta con la calle Entenza, con el fin de determinar qué intervención es necesaria pues es fundamental que se encuentre en buen estado, tal y como apunta el concejal de Territorio, Manolo Gomicia. Así, en función de la actuación que tenga que realizarse en este colector el plazo para la reurbanización del primer tramo variará, fijándose entre tres y cinco meses, siempre con el objetivo de que sea el menor posible, según remarca el edil.

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La primera fase abarca desde Espronceda hasta Isabel La Católica.

En cuanto al resto de tramos, la planificación pasa porque una vez finalice el curso escolar empiece la obra de Isabel la Católica a Góngora, y ya en verano desde Góngora a Isaac Peral y desde ese punto a la Vaguada. El plazo de ejecución de la actuación en su totalidad es de once meses, si bien desde el gobierno municipal confían en que a finales de este año pueda estar completada.

A la hora de hablar de la reurbanización propiamente dicha, Gomicia recuerda que no se trata de una obra complicada, puesto que básicamente consiste en actuar en aceras y calzada, reordenando el espacio y priorizando a los peatones, con aceras más anchas, dos carriles para el tráfico rodado y eliminando aparcamientos, a la vez que se dotará de insonoridad asfáltica, cámaras para controlar la velocidad, wifi y fibra óptica, arbolado y mobiliario urbano, entre otros.

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