“Espero un año para vivir este momento”
Iván Verdú, alma de los Cruzados, el equipo que domina con mano de hierro la última década en el Trofeu Filaes
Los Cruzados vuelven a reinar en el Trofeu Filaes y revalidan su título como campeones de fútbol sala sénior, la disciplina estrella de esta convocatoria única que mezcla deporte con fiestas. Se trata de una victoria que marca su quinta conquista en el torneo, demostrando una vez más su dominio en la cancha.
Con un radiante palmarés, los Cruzados ya escribieron en la historia de esta competición convirtiéndose en la primera filá en ganar la final dos años seguidos, sumando a su mérito la hazaña de tres triunfos consecutivos en las ediciones de 2016, 2017 y 2018. Además, llegaron a la final en otras ocasiones, como en 2015 frente a la Magenta y en 2019 contra los Abencerrajes, obteniendo el subcampeonato en ambas ocasiones. Solo en 2022 no lograron llegar a la final, pero en 2023 recuperaron su gloria al vencer a los Andaluces y, este año, han consolidado su posición como campeones, acumulando un total de cinco trofeos.
Iván Verdú, uno de los pilares del equipo, señala: “Creo que la clave está en que somos como una familia. Hemos visto a muchos de nuestros compañeros crecer desde pequeños, hemos sido testigos de su desarrollo. No queremos que ese ciclo termine nunca”.
La final, que enfrentó a los Cruzados contra los Ligeros, Iván la describe como una de las más difíciles que ha jugado: “Ellos tenían un equipazo y eliminaron a algunas de las filaes más fuertes durante el Trofeu. Además, muchos de nosotros compartimos vestuario en el Serelles y Serelles B, por lo que nos conocían bastante bien”. A pesar de la intensa competencia, el jugador subraya: “Fue una final muy bonita porque estábamos jugando contra nuestros amigos”.
El Trofeu Filaes, conocido como ‘La Champions del fútbol local’, es una competición en la que cualquier equipo tiene el potencial de sorprender, como señala Verdú: “Cada año el nivel es más alto y filaes que no las tenemos muy en cuenta a priori pueden dar la sorpresa, como la Llagaña, que nos lo puso difícil, o los Montañeses que me sorprendieron mucho también”.
Una competición que, además de por la unión del deporte y la Festa, tiene un significado especial para Iván por poder compartirla con su hermano menor, Mauro. Y es que, la dupla Verdú, destacada por ser un pilar sólido de Los Cruzados, lleva compartiendo vestuario prácticamente toda su vida, tanto en la liga regular con el Serelles como en el Trofeu Filaes. “Jugar con mi hermano es lo más gratificante a nivel deportivo que me puede pasar, ya sea en el Trofeu Filaes o en el Serelles. Hemos jugado prácticamente siempre juntos, y tenerlo a mi lado es fundamental para mí”, confiesa Iván. Además, resalta la importancia de otros miembros del equipo, como el entrenador Pablo Pérez ‘Pablito’ y Nando, a quienes considera ‘como dos hermanos más’.
En esta gran final, uno de los artífices de los goles de los Cruzados fue Mauro Verdú, a lo que Iván destaca: “Cuando marcó, me alegré tanto como cualquier otro. Además, este año era la primera vez que mi sobrino (su hijo) lo veía jugar, así que verlo anotar delante de él fue una doble alegría para mí”. Iván Verdú, también tiene palabras para el líder del conjunto: “El mejor capitán que podemos tener es Capone, lleva toda una vida jugando y tiene muchísima experiencia. Allá donde va es casi siempre el capitán, y con razón, porque es un buen líder y siempre tiene palabras en los momentos que toca estar”.
Con otra victoria más, Los Cruzados muestra su dominio y enseñan ‘la manita’ de copas en el Trofeu Filaes. Sin embargo, hay algo por encima de todo que traspasa el número de trofeos para Ivan: “Lo que más disfruto es el llegar al vestuario y vivir todo lo que llevamos un año esperando, ver las caras de ilusión, cantar nuestras canciones, ver a toda una filà venir a animarnos, etc. Para mí es de los momentos más esperados del año “.
Un año entero de espera para disfrutar de apenas dos días de competición, que momentáneamente detienen la rutina de la liga regular, donde Iván Verdú compite con el Serelles, equipo que esta temporada no está obteniendo resultados tan positivos como se esperaba. “Hay gente nueva, además no estamos teniendo mucha suerte con las lesiones y llevamos prácticamente todo el curso sin poder contar con la plantilla completa. Aún así, estamos haciendo un trabajo increíble; la gente nueva se está adaptando muy bien, y poco a poco vamos recuperando a toda la plantilla”, afirma Verdú.
En cuanto a su situación personal, el jugador también asegura que ha sido una de las temporadas más complicadas debido a las lesiones. “Me he perdido casi la mitad de los partidos, pero veo al gran equipo que hemos hecho y estoy muy contento. Ahora estoy empezando a tener algo de suerte con las lesiones, así que espero poder ayudar al equipo en la recta final”, sigue el futbolista.
El Serelles ahora se enfrenta a una fase crucial de la temporada, con la visita de los tres primeros equipos de la tabla a nuestra ciudad. “Sabemos que nos jugamos mucho y estamos muy convencidos de que vamos a sacar los puntos necesarios”, asegura Verdú. Los objetivos con respecto al inicio de la temporada han cambiado, y ahora en lugar de aspirar al ascenso, la lucha se centra en asegurar la permanencia. “Nuestro objetivo nunca ha sido mantener la categoría, pero por circunstancias nos ha tocado estar peleando por ella. Aún así estamos seguros que lo vamos a hacer y de que el año que viene será una gran temporada en la que pelearemos por el ascenso a 2B. Confiamos muchísimo en el equipo que tenemos y en el trabajo que está haciendo Pablito, que es excepcional. Con las pocas cartas que ha tenido para jugar ha sacado oro”, concluye de manera positiva.