El Via Parc toma forma: 4 millones para el primero de cuatro tramos

El próximo año está previsto licitar las obras de la primera fase entre La Salle e Isabel la Católica

El Via Parc toma forma
El primer tramo discurre por el actual carril bici que cruza Horta Major desde La Salle. XAVI TEROL

El gobierno municipal ha dado a conocer esta semana la “filosofía” de otro de sus proyectos “estratégicos” para la ciudad, en palabras del alcalde, Toni Francés. Se trata del denominado Via Parc, que cubre el trazado del anteriormente llamado bulevar de la Uixola a través de la cornisa norte, entre La Salle y el Collao, y que se define como “un itinerario verde, sostenible e integrador que unirá cuatro barrios de la ciudad”, según se expuso en la presentación del proyecto, el pasado martes en el Ágora.

El Via Parc se divide en cuatro tramos diferenciados, con un coste que se acerca a los 12 millones de euros. Los esfuerzos se centrarán en un primer momento en la ejecución del primer tramo, que discurre entre la cuesta de La Salle y la zona de Horta Major a la altura de la calle Sant Isidre, donde cobra especial relevancia la intersección existente en Isabel la Católica, un punto sensible para el tráfico y cuya resolución demandan los vecinos desde hace tiempo.

Este primer tramo consta de 700 metros de longitud y las obras están valoradas en alrededor de 4 millones de euros. Un presupuesto para el que el Ayuntamiento cuenta con el compromiso de la Generalitat Valenciana, según señala el alcalde, quien en declaraciones a este periódico informa que los presupuestos autonómicos de 2022 contemplan una partida de 250.000 euros para el inicio de las obras, cuya licitación se prevé a lo largo del próximo año y se financiarán en diferentes ejercicios.

En cuanto al proyecto en sí, el responsable del estudio ganador del concurso de ideas que convocó el Ayuntamiento, Santiago Pastor, explicó que el trazado incorporará dos carriles para el tráfico rodado, uno por sentido de circulación, lo que obviamente ayudará a descongestionar el tránsito de la ciudad, aunque no es este su cometido únicamente. “El objetivo es conseguir que la intervención no sólo resuelva los problemas de movilidad urbana, si no que sirva para que la ciudad sea más humana, más sostenible y saludable”, indicaba el arquitecto acerca de la filosofía de este tipo de trazados, que define como alejado del anterior concepto de bulevar.

En la imagen superior puede observarse el modelo que se quiere aplicar, a modo de eje “integrador” y “vertebrador” de la ciudad. La longitud total del trazado completo es de casi dos kilómetros, siendo el más extenso y complejo en su resolución el que se plantea actualmente, puesto que requiere salvar una zona de grandes desniveles hasta Sant Isidre.

El siguiente tramo comprende hasta el puente del Guitarrista José Luis Gonzalez; el siguiente, desde este punto hasta la intersección con la calle Xixona, a la altura del Romeral; y ya el último segmento corresponde al trayecto hasta casi el Collao (calle Benimarfull). El concejal de Urbanismo, Jordi Martínez, remarca que la envergadura del proyecto obliga a acometerlo por fases y ahora la prioridad es el primer tramo, para el que se abre un período de participación vecinal.

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