El Ministerio reparará de urgencia la Vaguada
El paso del Benisaidó, más conocido como la Vaguada, va a sufrir una reparación de urgencia debido a que no se encuentra en condiciones adecuadas. Según información a la que ha tenido acceso este periódico, la rehabilitación de la bóveda de la Vaguada de Alcoy ha sido declarada obra de emergencia por parte del Ministerio de Fomento, responsable de la infraestructura, afectada desde hace décadas por la inestabilidad del terreno en la zona.
Fomento, asimismo, ya ha encargado su reparación a la empresa CHM, la firma adjudicataria de las obras de la calle Entenza. La actuación, según se ha podido saber, se considera técnicamente complicada por lo que todavía no ha determinado un coste final ni un tiempo de ejecución, que puede variar por la dificultad de la misma.
Tras haber realizado las prospecciones necesarias, se ha decidido empezar a actuar ya retirando los puntales existentes en este momento y consolidando la base actual con hormigón, a la vez que se procederá a colocar unos arcos de hierro para sujetar la estructura de esta importante infraestructura viaria.
Fuentes municipales consultadas han confirmado a este periódico que, por ahora, no será necesario el corte al tráfico, y que se ha comunicado al Ayuntamiento que los camiones de la empresa adjudicataria de las obras de la Vaguada accederán por la plaza Benisaidó, al igual que será aquí donde se deposite el material necesario para la ejecución de los trabajos.
UN PROBLEMA QUE NO ES NUEVO
La reparación de la Vaguada es un tema que está pendiente desde mediados de los años noventa, cuando se detectó un problema de estabilidad, que obligó a apuntalar las galerías subterráneas en el cauce del Benisaidó. En su momento, Fomento planteó una actuación para reemplazarla por un puente, pero el proyecto (1998) fue aplazado ante los graves inconvenientes que supondría para el tráfico, dada la inexistencia entonces de la circunvalación de la ciudad. En 2015 el Ayuntamiento encargó nuevos informes al Ministerio para comprobar el estado real de la construcción, que data de mediados de los 80.