El gobierno ‘salva’ la ordenanza de la ORA gracias a Marcos Martínez
Hizo posible con su abstención que el empate en la doble votación fuera resuelto a favor del gobierno, con el voto de calidad del alcalde
La Ordenanza Reguladora del Aparcamiento (ORA) salió ayer adelante, como suele decirse, por los pelos. Y es que la oposición en bloque votó en contra del documento y el primer anexo que regula el sistema de rotación en la calle Torremanzanas, exceptuando el hasta ahora concejal de Ciudadanos, Marcos Martínez, que la pasada semana comunicaba su cambio al grupo de los no adscritos, trámite que ayer se formalizaba en el Pleno.
Martínez anunció que iba abstenerse dadas las “circunstancias” personales y gracias a esto, el gobierno municipal pudo aprobar la citada ordenanza, después de dos votaciones que se saldaron con sendos empates a 12. El voto de calidad del presidente de la corporación, es decir, el alcalde, decantó la balanza hacia los socialistas, que en esta ocasión se quedaron solos en la aprobación inicial de la ordenanza de aparcamiento. Ahora le seguirá un proceso de exposición pública en el que se podrán presentar alegaciones, con lo que hasta dentro de “tres o cuatro meses” no estará en marcha, calcula el concejal de Movilidad, Jordi Martínez.
A la hora de justificar su rechazo a la ordenanza, casi todos los grupos argumentaron que el sistema rotatorio propuesto excluye a los vecinos, y critican la falta de alternativas para residentes y personas que trabajan en el Centro. Desde Guanyar creen que destinar la zona de Torremanzanas a aparcamiento comercial se contradice con la peatonalización porque fomenta que “la gente coja el coche para venir al Centro”. Mientras, Podem mostraba sus dudas acerca de “si es el mejor momento para llevar a cabo esta experiencia piloto” en Torremanzanas y pedía dejar sobre la mesa la aprobación de la ordenanza.
Por parte de Ciudadanos, Rosa García plantea adoptar una fórmula de aparcamiento “mixta”, de rotación y para residentes, como también el exedil propone el aparcamiento de la calle Sant Joan como zona alternativa para poner en práctica esta experiencia y abrir La Cordeta en sentido contrario de circulación, de cara a facilitar el tráfico de rotación en la zona. El concejal de Movilidad anunció que se estudiarían ambas propuestas.
Del lado del PP, se criticó la “forma de trabajar totalmente arbitraria” del departamento “que acaban por pagar vecinos y comerciantes”, aseguró Quique Ruiz. Y en la misma línea se pronunció Compromís, que dijo que “estamos haciendo parches” en materia de movilidad. Para Vox, “las ordenanzas privan de libertad de movimiento” y de ahí su voto en contra.
90 min. de aparcamiento máximo
Jordi Martínez defiende que la ordenanza viene a sustituir a la antigua ORA, con la que “tampoco podían aparcar los vecinos”, remarca, y además, de pago; de hecho, a lo largo de una década tuvo un coste de más de 2 millones de euros para las arcas municipales, según señala Martínez. La nueva ordenanza, en cambio, supone regular el estacionamiento limitándose el tiempo, pero el aparcamiento seguirá siendo gratuito.
Para la zona de Torremanzanas se ha establecido 90 minutos de aparcamiento máximo, de 9 a 13’30 y de 16 a 20, de lunes a sábado. No se puede volver a estacionar hasta haber transcurrido dos horas. Las cámaras de vigilancia controlarán a los vehículos y se sancionarán las infracciones con 50 euros.