Dos detenidos por explotar a repartidores de comida a domicilio que trabajaban sin carnet
En Banyeres , Sax y Castalla, y les prometían regularizar su situación al estar ilegales en España
Agentes de la Policía Nacional de Alcoy y de Elda han detenido a dos hombres por un delito contra el derecho de los trabajadores, tras una laboriosa investigación en la que se inspeccionaron cuatro establecimientos en las localidades de Banyeres de Mariola, Sax y Castalla, en una operación conjunta de las Brigadas de Extranjería y Fronteras de ambas comisarías locales, la Unidad de Policía Nacional adscrita a la Comunidad Valenciana y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
Se comprobó que en esos establecimientos trabajan nueve personas extranjeras que no contaban con contratos de trabajo en vigor, además de observar una serie de infracciones en el orden social que habían sido denunciadas.
Todo comenzó cuando se identificó a una persona que había sufrido un accidente con una motocicleta de una empresa de reparto de comida en Banyeres. El herido desveló que se encontraba en situación irregular en España y que además trabajaba de manera ilegal, desde mediados del año pasado. En cuanto tuvo oportunidad se puso en contacto con su jefe, el cual se desentendió de esta situación y manifestó que apenas conocía al herido y que no era problema suyo.
Al verse desamparado, relató a los agentes el calvario que había vivido desde que comenzó a trabajar para dicha empresa. Denunció que al principio no recibía dinero alguno, trabajaba a cambio de la promesa de regularizar su situación, de alimento y de alojamiento, pero que un momento dado, su jefe tuvo miedo por ser descubierto y le echó de su casa, quedándose con su documentación. Desde entonces, vivía en la calle y recibía la cuantía de 400 euros por turnos de trabajo de 12 horas diarias en condiciones de explotación laboral. Debido a que vivía en la calle, tenía las manos inflamadas por el frío que pasaba y sufría heridas en las mismas, pero aún así continuaba trabajando y manipulando alimentos sin tener ningún tipo de curso o carnet que lo permitiera. De igual manera, su jefe era conocedor de la falta de carnet de conducción, diciéndole que no importaba, que si ocurría algo él se haría cargo.
Los agentes comenzaron la investigación comprobando que una empresa cuya actividad se desarrollaba en tres establecimientos de restauración y una frutería, ubicadas en Castalla, Sax y Banyeres, estaban cometiendo abusos a sus trabajadores contratando a personas extranjeras cuya situación en España era irregular y que aprovechando esta situación de extrema necesidad y de carencias de todo tipo, obtenían con ello un beneficio económico.
Las detenciones llegaron finalmente, por una parte se detuvo a dos personas por Infracción a la Ley de Extranjería y, por otra, al administrador y al encargado del establecimiento de Banyeres, por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores, al utilizar engaño y prácticas abusivas con sus trabajadores en cuanto a sus condiciones laborales, así como por una infracción a la normativa de Prevención de Riesgos Laborales.
Los detenidos, de nacionalidad pakistaní, de 43 y 35 años de edad, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de las mismas localidades donde se practicaron las detenciones.