Covid-19: 365 días después
Mañana se cumple un año desde la primera declaración del estado de alarma en España
Una vuelta al sol ha pasado ya desde que Alcoy, toda esta zona y la geografía española en general se adentró de lleno en una situación inaudita, desconocida y de total incertidumbre. Parece mentira, pero se ha cumplido un año de las primeras consecuencias de la Covid-19: muertes, restricciones, paralización de actividades y declaración de estado de alarma el sábado 14 de marzo de 2020, que se tradujo en un confinamiento que nos hizo permanecer en casa y que trajo a las calles un aspecto desértico y de absoluto silencio cuando horas antes la estampa era totalmente distinta. Ese mismo sábado por la mañana los supermercados estaban repletos de clientes que llenaban los carros de la compra con alimentos, la gente acudía a las farmacias pidiendo mascarillas y paracetamol, en la noche del viernes los establecimientos hosteleros echaron la persiana sin saber qué iba a suceder al día siguiente, y así una sucesión de acontecimientos a los que no podíamos dar crédito. De repente no se podía visitar a los amigos y familia; tampoco viajar o salir a hacer deporte; los guantes y el gel hidroalcohólico, primero, y la mascarilla después, se volvieron complementos indispensables de nuestro atuendo; se cerraron colegios, teatros, comercios no esenciales… En resumen, el día a día y la vida tal y como la conocíamos hasta ese momento se esfumó.
MOMENTOS Y MEDIDAS EXCEPCIONALES
Respecto a esos primeros momentos, el alcalde de Alcoy, Toni Francés recuerda que fueron de “mucha angustia. La situación que estábamos viviendo era muy extraña, no acabábamos de saber la dimensión, pensábamos que era cuestión de un mes, que paralizando actividades, suspendiendo eventos y con el confinamiento podríamos vencer el virus. Pensábamos que eran medidas muy excepcionales y muy acotadas en el tiempo, y no ha tenido nada que ver con eso”.
Precisamente la excepcionalidad de la situación derivó en la toma de numerosas decisiones. “Hubo mucha inseguridad al principio. No sabíamos si nos estábamos excediendo o quedando cortos. Es una crisis para la que nadie estaba preparado, no teníamos un referente”. El alcalde de Alcoy reconoce que “en muchos casos, y visto con la perspectiva de un año, todos hubiéramos actuado de forma diferente de saber lo que iba a pasar, pero en ese momento no podíamos prever lo que iba a suceder”.
CRUDEZA DE LA SITUACIÓN SANITARIA
En esa misma tesitura se encontró el departamento de Salud de Alcoy, cuyo gerente, Enrique Barbeito, detalla que en la primera ola había “ignorancia” por parte de todos respecto a los que podía ocurrir. “Tuvimos dificultades organizativas, a pesar de ello nos organizamos bien, incluso en exceso”. Explica además que en esa primera ola “los ingresos Covid no fueron exagerados” teniendo en cuenta las cifras de la tercera ola. “En ese momento estábamos muy preparados pero muy asustados, a excepción de las residencias de mayores, donde la situación fue complicada, el hospital funcionó bien”.
Barbeito destaca lo vivido en estos últimos dos meses. “Desde las fiestas de Navidad la situación ha sido de sobrecarga, viendo cómo se estaba comportando la gente se veía venir. Ahora hemos trabajado con números excesivos. Psicológicamente estábamos agotados para hacer frente a una situación así, pero el personal sanitario es así, se ha soportado y se ha pasado”.
REPERCUSIÓN ECONÓMICA
Durante este año la pandemia ha causado verdaderos estragos en la economía. Muchos sectores se vieron paralizados en un primer momento, mientras que otros apenas han podido abrir durante este año, incluso otros que no han podido trabajar en todo este tiempo.
El presidente de la Federación Empresarial de L’Alcoià y el Comtat (FEDAC), Natxo Gómez, explica que desde el inicio “lo vivimos mal, había mucha incertidumbre, no saber qué pasaría, cuándo se abriría, si sería largo, corto…y la duración ha sido más larga de lo que esperábamos”.
Gómez añade que “gracias a ser comarcas industriales hemos conseguido aguantar, no ha subido demasiado el paro, incluso se han generado puestos de trabajo. Las empresas han sabido reinventarse, cambiar el modelo de producción. El textil y la cosmética son ejemplos claros de ello”. El presidente de FEDAC comenta que esto no ha sucedido “en el 100% de la comarca, la situación ha afectado mucho a la hostelería y la restauración, igual que en el resto de la Comunitat Valenciana y España, pero al no depender únicamente del turismo y la restauración, hemos podido aguantar, pero ha afectado mucho”.
ESPERANZA EN LA VACUNA
“Tendremos que espabilarnos para intentar salvar el verano”, asegura Gómez haciendo alusión al proceso de vacunación, “siempre y cuando no haya nuevas mutaciones para las que las vacunas no estén preparadas”.
En la vacuna también confía el primer edil de Alcoy y el gerente del departamento de Salud, como “una barrera” que ayude a volver a la normalidad, pero que también “garantice la salud”, en palabras de Toni Francés, quien considera que “el proceso de vacunación vaya bien” es importante de cara “a la recuperación económica”. El primer edil añade que “parece que hay luz al final del túnel” pero que para “superar esto, es importante no perder la prudencia y la responsabilidad”.
Puede leer el reportaje completo en la edición de El Nostre Ciutat del sábado 13 de marzo de 2021.