Comando Covid-19
La crisis sanitaria provocada por el Covid-19 ha comportado una verdadera transformación de la vida y de las relaciones sociales y laborales sin precedentes en el último siglo. Las fuerzas de seguridad, que tienen la misión clave de velar por el cumplimiento del Estado de Alarma, no son ajenas a ello. Las plantillas de Policía Nacional, Bomberos y Policía Local se han visto obligadas a modificar sus estructuras para adaptarse al coronavirus y evitar así que los contagios mermen sus filas.
El Ministerio del Interior quiere evitar que la pandemia afecte a la viabilidad del trabajo, como ocurre ya con los sanitarios, que están precisando refuerzos para atender el incremento de la demanda asistencial en los hospitales. La fórmula más utilizada para reorganizar el servicio de la Policía Nacional es el denominado binomio estable: dos agentes que trabajan siempre juntos, de manera que si uno de ellos enferma, afecta a su compañero, que se queda en casa para cumplir la obligada cuarentena.
Por su parte, la Policía Local también ha hecho cambios de turnos y ha reforzado servicios en función de las necesidades, tal y como explica el concejal de Seguridad, Raül Llopis, quien destaca la rápida coordinación de los efectivos desde que se decretó el Estado de Alarma, a la vez que explica que la labor de los agentes municipales está consistiendo en la realización de controles a vehículos y personas, en este caso en colaboración con la Policía Nacional. Uno de los puntos de control para los agentes son las entradas y salidas a la ciudad, junto con patrullas que rastrean el casco urbano para evitar desplazamientos indebidos de ciudadanos.
En este sentido, se llevan tramitadas ya en Alcoy más de 70 denuncias por esta infracción y recuerda el edil que las sanciones pueden ir de 100 a 600 euros, para las de carácter leve, y de mil hasta 600.000 euros, incluso penas de prisión, para las infracciones más graves. En cuanto a la casuística y el perfil de los sancionados desde el pasado 16 de marzo en la ciudad es muy variado y, según apunta el concejal, las multas están más relacionadas con la “picaresca” de los vecinos que no con el desconocimiento de la normativa. Así, entre los sancionados hay desde personas que bajan la basura y con la excusa deambulan por la calle, hasta el recurrente caso de vecinos que pasean al perro de forma repetida, que aseguran que van a comprar mientras se dedican a recorrer el barrio con una bolsa medio vacía, incluso gente que sale a correr o a hacer deporte al aire libre.
BOMBEROS PROTAGONISTAS
La cara más amable del servicio que estos días prestan en la ciudad los cuerpos de seguridad la ponen todos los días los Bomberos del parque de La Muntanya. Cada tarde, antes de las 20 horas, salen del retén para estar puntuales a las puertas del Hospital y aplaudir a los sanitarios. Luego, acompañados del resto de fuerzas de seguridad, recorren la ciudad haciendo sonar las sirenas de sus vehículos y dando ánimos a la población en general.