¿Colaboradores o espectadores? AMALIA PAYÁ. Concejala del PP en Alcoy
La participación real solo es posible con información en la que sustentar el debate ciudadano. Máxime cuando los vecinos tienen que opinar y decidir, en nuestro nombre o en representación de un colectivo, entre las diferentes cuestiones puestas sobre la mesa. En este caso, necesitan toda la información de los asuntos a tratar para analizar y consensuar qué decisión tomar.
Esto que parece tan evidente no lo es para el Gobierno local socialista de Alcoy, puesto que se niega a facilitar esta información a los componentes de órganos consultivos, mesas y consejos sectoriales. Información, insisto, relativa a los asuntos a tratar en cada convocatoria. Con la intención de corregir este déficit democrático planteamos una propuesta el pasado Pleno y, sorprendentemente, fue rechazada por el Gobierno de Antonio Francés.
En no pocas ocasiones nos encontramos en órganos de participación en las que sus componentes no saben qué va a tratarse. Solo disponen de la críptica frase reflejada en el orden del día. En nuestra propuesta defendíamos que los miembros de las diferentes entidades o consejos de participación dispongan de antemano, por ejemplo, de las propuestas que formula bien el Gobierno o bien otros componentes. De esta forma es posible que las entidades puedan establecer un criterio propio que permita un debate real.
Estamos convencidos de que la aportación de información incentiva la implicación de los miembros de las entidades cívicas y enriquece el debate. Pero sin esta información no se puede debatir, aportar ni cuestionar, por lo que la participación queda anulada. Probablemente es lo que pretende el Gobierno de nuestra ciudad: crear entre los colectivos la “ilusión” de participación.
El Gobierno de Antonio Francés promulga una participación que no incomode, que se limite a escuchar sus propuestas, asentir y callar, puesto que los ciudadanos no tienen herramientas para poder debatir ni colaborar. Y, ya se sabe: quien calla otorga.
Una muestra de esta forma de proceder ha sido la campaña Viure al Centre en la Mesa del Centro. Lo único que sabían sus componentes era que el Gobierno estaba trabajando en una campaña para atraer personas a vivir al barrio. Meses después recibió la iniciativa ya decidida, sin posibilidad de opinar, valorar o proponer alternativas.
Lamentamos que el Gobierno del PSOE se haya negado a promover una participación real. Defendemos que el Ayuntamiento ofrezca herramientas a ciudadanos y colectivos para que puedan aportar propuestas en órganos de participación, se conviertan en colaboradores y no queden como espectadores limitados a asentir las propuestas del Gobierno.