Cocentaina recupera el nombre tradicional de sus calles
Se han colocado 35 placas por varios puntos del Raval y La Vila
El Ayuntamiento de Cocentaina ha puesto en marcha una iniciativa surgida en los Presupuestos Participativos y consistente en rotular las calles del casco antiguo, y algunas más recientes, con la denominación popular que tiene entre los habitantes de la capital del Comtat. De esta forma se han creado unas treinta y cinco placas de hierro, que se han situado debajo de las existentes, para definir el nombre de cada vía, y en las que se refleja el nombre tradicional de la misma e incluso algunos datos de interés. Para ello se ha desempeñado un trabajo previo de estudio y recopilación por parte de la Agència AVIVA de Promoció del Valencià tomando como referencia el libro de Francesc Jover editado por el Consistorio en 2002 que recogía la historia de todas las calles contestanas existentes hasta ese momento.
La propuesta ha contado también con el aval de las concejalías de Participación y Patrimonio del mismo Ayuntamiento estando ahora sobre la mesa la idea de crear una ruta por algunas de estas calles. “Así podríamos explicar con más detalle la historia de los mismos y las curiosidades que aguardan. Estamos muy contentos por ver este proyecto hecho una realidad y queremos agradecer a todas las personas que han trabajado para hacerlo posible. Con la colocación de estas placas mantenemos viva la memoria de las denominaciones tradicionales de las vías urbanas de nuestro pueblo para que no se olviden y sigan pasando de generación en generación”, detallan los ediles Maite Valls e Iván Jover; respectivamente.
Indicar que esta doble rotulación la encontramos por ejemplo en calles como Santísima Trinidad (Carrer Gitanos), Pintor Espinosa (Carrer Nou), calle Cervantes (Carrer Fora), Plaza Venerable Escuder (Plaça del Mercat) o Plaza Anselmo Martí (El Camet); entre otros muchos.
También hay algunas denominaciones menos conocidas, pero igualmente tradicionales, como por ejemplo la calle de la Sagrada Familia, el nombre popular de la cual es ‘Apreta-panxes’ o ‘Pretapanxes’, probablemente debido a la estrechez de la calle. Lo mismo ocurre con la calle de San Hipólito, que se conoce popularmente como la plazoleta del Cementerio, puesto que entre los siglos XV y XIX se usó como cementerio parroquial.