Calzado a base de plástico, corcho, papel o maíz
Materiales que podrían acabar en el mar y contaminar son los elementos principales de un calzado ecológico.
Slowwalk es una empresa de Elche que ha apostado por una colección eco-sostenible, cuidando el medio ambiente y 100% vegana. Su calzado está creado a partir de botellas de plástico encontradas en el mar Mediterráneo, corchos de bosques sostenibles, piel ecológica, maíz y residuos de la industria de la moda.
Así mismo, todos los productos están hechos a mano, lo que permite la reducción del consumo energético y con ello la disminución de emisiones de CO2.
La idea es que cada uno de los elementos que conforman el zapato «se separe fácil» y pueda volver a aprovecharse para un nuevo zapato cumpliendo así con el concepto de «economía circular», explica Juan Caparrós.
Foto: Infografía de modelo de calzado ecosostenible | Slowwalk