Anuncian, entre críticas, una nueva licitación de la obra del Andreu Sempere

Desde que recientemente se diera a conocer que el concurso de las obras de reforma del instituto Andreu Sempere ha quedado desierto, el gobierno municipal no ha dejado de recibir críticas por la gestión que del proyecto ha realizado el Ayuntamiento, que actúa como administración delegada en este caso, al tratarse de una actuación incluida en el Plan Edificant, cuyo responsable es la Generalitat Valenciana. Tal y como se informó, el problema a la hora de que las empresas no se presenten ha sido el incremento del precio de los materiales y el transporte, debido a la crisis que se vive en la actualidad, lo que está provocando que proyectos redactados queden desfasados en poco tiempo.

Desde el gobierno municipal se defienden en este sentido, asegurando que “es algo que está pasando en todo el país” y que es “algo que no solo ha ocurrido en nuestra ciudad, sino con muchos otros centros educativos”. Con todo, remarcan que el Ayuntamiento ya trabaja “dentro de sus competencias” para sacar de nuevo a licitación las obras y que puedan ser adjudicadas “lo más pronto posible”.

Al respecto, indican que la Conselleria de Educación ya ha procedido a actualizar los precios, a la vez que el Ayuntamiento ya ha encargado la modificación del proyecto en base a la nueva valoración y se espera que esté redactado “lo más rápido posible” para enviarlo a Conselleria, que lo acepte, y pueda ser licitado de nuevo con el objetivo de que las obras puedan empezar en la fecha prevista inicialmente: el próximo 31 de julio.

Finalmente, el Ayuntamiento queda pendiente también de que Conselleria elija uno de los espacios puestos a su disposición para la reubicación del alumnado durante las obras.

Mientras, por parte de la oposición, el PP atribuye este nuevo contratiempo en el proyecto de reforma del instituto, a la “lentitud” del gobierno municipal en concursar los trabajos. Según recuerdan, el proyecto fue entregado al Ayuntamiento en diciembre de 2020, pero no fue licitado hasta un año después. Desde el PP no entienden “cómo se tardó un año en dar el visto bueno al proyecto y licitarlo sin haber revisado los precios”, calificando la gestión como “nefasta”.

Lo mismo opina Guanyar, que arremete duramente contra el gobierno municipal, llegando a “dudar del interés de los diferentes concejales del gobierno de Francés en que el Andreu Sempere salga adelante (…) No en vano son profesores de la escuela concertada”. Su portavoz, Sandra Obiol, achaca al gobierno municipal el “cúmulo de negligencias” que atesora el proyecto, demandado desde 1999 según Obiol, al tiempo que acusa directamente al equipo de Toni Francés de “no haber sabido hacer la redacción de un proyecto con suficiente destreza como para que haya empresas que quieran optar”.

Por último, desde Compromís se ofrecen a colaborar para avanzar en el proyecto, dado que la Conselleria de Educación está en manos de su partido y, en este sentido, les “consta” que la administración autonómica “ha puesto todas las facilidades para que la tramitación se acelerara”.