Actitudes en la grada
Parece superado el bache con el que el Deportivo terminó el año anterior e inició este 2022. Aquellos dos puntos de 18 posibles se convirtieron en una losa muy pesada y generó dudas sobre el equipo.
Quizás la Copa despistó algo al equipo o solo fue el típico bajón que todos tienen en algún momento de la temporada.
Además en una categoría como la Primera RFEF tan igualada, encadenar una buena o mala racha de resultados te puede aupar a la zona alta o terminar condenándote a la zona baja.
Y es que la Primera RFEF no está decepcionando y el equipo que sea capaz de lograr una buena regularidad, logrará sus objetivos. Mañana tenemos al Sevilla Atlético, un filial que parecía condenado a luchar por la permanencia pero al que sus últimas cuatro victorias le han dado aire y se presenta en el Collao en su mejor momento. Seguro que pondrá las cosas complicadas, porque calidad no le falta. Sin embargo, el Deportivo sabe muy bien cuáles son sus armas.
Estamos en un momento de la temporadas en el que no vale relajarse ni bajar los brazos. Todos los equipos están luchando por algo. Sería muy importante mantener e incluso incrementar la distancia sobre la zona caliente de la clasificación y que cuanto antes, el equipo logre sellar la permanencia y dar tranquilidad al club.
No me gusta nada lo que se ve reflejado últimamente en las actas, con lanzamiento de objetos al campo. Quien no sepa comportarse es mejor que se quede en casa.
No se puede consentir que se manche a toda una afición por un impresentable. Hace falta que se tomen medidas, no esperar más a enquistar el problema. El club, las autoridades o quien sea, que tome nota y se erradiquen de inmediato estos comportamientos.
Tampoco me gusta la actitud de algún miembro de los cuerpos técnicos rivales. Veo bien que se tomen imágenes para analizar el juego de su equipo. Otra cosa muy diferente es que se llegue a recriminar nuestros jugadores e incluso se llegue a encararse con la grada.