Los familiares del caso de Domus Vi Alcoy no recurrirán la sentencia

Un mes después de que se conociera la desestimación de la demanda presentada por 46 familiares de 18 residentes y usuarios de Domus Vi Alcoy contra la gestora de la residencia, Quavitae, y contra la entidad aseguradora, Mapfre España, han sido los mismos familiares los que han dado a conocer la decisión de no recurrir la sentencia.

Esta determinación llega después de un mes de análisis y valoraciones: “el esfuerzo económico que supondría continuar, tras casi cinco años de litigio, ya no es asumible”, apuntan.

Asimismo, el José Luis García, presidente de la Asociación de Familiares Afectados de las Residencias Domus Vi Alcoy y Cocentaina, hace alusión a la necesidad de “cerrar” esta etapa: “en la vía jurídica ya no tenemos nada que rascar si no se pueden aportar nuevas pruebas”.

Sin embargo, todos los familiares coinciden en continuar con la lucha de la Asociación “para que las personas mayores reciban el trato digno, humano y seguro que merecen”.

García señala que “no tenemos ninguna respuesta” de lo que pasó en el interior de Domus Vi para que fallecieran 74 personas durante las primeras semanas de la pandemia de la Covid-19, si no que con el proceso judicial “han salido más interrogantes”, para los que tampoco tienen ninguna respuesta, asegura.

Los familiares hacen alusión a la dificultad a la que se han enfrentado desde el primer momento para obtener información y documentación: “a pesar de todas estas trabas, nuestros representantes legales consiguieron fundamental la demanda, que fue admitida a trámite, lo que consideramos un logro significativo”.

En esta línea remarcan la relevancia de este juicio, el primero en España por el fallecimiento de personas mayores en residencias durante la pandemia: “desde el inicio sabíamos a quién nos enfrentábamos”, haciendo referencia al peso de la mercantil que gestiona Domus Vi Alcoy: “por mucho que se quiera maquillar, entendemos que no todos partimos en igualdad de condiciones cuando acudimos a la justicia”.

Especialmente críticos con la sentencia se muestran los familiares: “echamos en falta una mayor sensibilidad y rigor en la valoración de los testimonios e informes periciales”, y de nuevo, apuntan directamente al argumento de la edad al que señalaron peritos de la parte demandada: “estas personas ya eran frágiles mucho antes de la pandemia, pero no fallecieron juntas en un mes por casualidad”, concluyen.

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